Muñeca rota

Y de tanta tensión
se rompió la goma.
Hay que ser flexible, dicen,
pero nunca doblegarse a otros.
Y esque a ella
le habían tirado demasiado
de los extremos,
y habían puesto
patas arriba
el centro de su eje.
Perdida
y rota.
Porque hasta los pilares más fuertes ceden
si llevan excesivo peso
sobre sus espaldas.
Ya había soportado demasiado,
y cuando le dejaron sin apoyos
se desmoronó,
pedacito a pedacito.
Se la puede ver ahora,
despedazada, en el suelo.
Como una muñeca rota.
(Cortaron los hilos
con los que la manejaban
y ella cayó sin remedio)
Si te encuentras una pieza
de un corazón fragmentado,
devuélvesela,
que es suya.
(De cuando le hicieron trizas,
y el viento se llevó sus principios).

 

Delicia de obra, una inspiración excepcional, creación maravillosa.
Jorge Lemoine y Bosshardt, "Estrella Máxima" de Mundo Poesía.

 

Muchísimas gracias Jorge

 

Muchísimas gracias LUZYABSENTA, un placer que me hayas leído