Mustia memoria

Tinieblas en pleno día, no hay luz de sol ni alegría,
rostros afligidos como el de aquel niño
quien me cuenta con un gimo,
pues su pueblo se ha hundido
en las aguas del río.

Desnudos se muestran
hombres, mujeres y niñ@s
dejando su vergüenza bautizada pues
las bravas aguas su ropa les ha sacado.

Se escuchan las sirenas de las
ambulancias brindando auxilio
camiones del ejército, en amparo y protección.

¡Ahí viene el camión!
comida y cobijo, dicen los vecinos,
unidos y solidarios con los soldados.

¡Yergue la esperanza en los cielos!
Vuelan las avionetas y helicópteros
cronistas del desastre y el desespero
de un pueblo que se niega a morir, bajo las aguas,
subyace en sus suelos húmedos la dignidad
y el orgullo de ser del lugar oriundo.

Nublos y afligidos los adornos van quedando
llorosa, apenada la navidad se ha ausentado.



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Fue peor de lo que puedo describir, una de tantas inundaciones al sur del lago estado Zulia, Venezuela, donde pueblos enteros quedaron a la merced de las aguas, uno de ellos Santa Cruz desapareció por completo lugar de origen de mi madre.
De esto no hace mucho, el niño al que hago referencia hoy dia es aun adolescente fiel testigo de lo ocurrido.

 

maravillosa forma de pintar a la melancolía,,, es lo único que puedo opinar me dejaste sin palabras.

 

Amigo Luis, placer recibir su comentario y que se escuche en los cielos su plegaria.

 

Gracias por tu comentario, créeme Anthony me cuesta muchísimo escribir en este tono y en los otros también ji ji

 

Cuanta melancolía transmiten tus versos Poeta. Un beso, saludos

 

Maldonado eso es bueno, que sientas la melancolía pues entraste en la historia. Un abrazote cariñoso.

 

Tu poema de buena redacción descriptiva atrapa al lector desde el principio. La solidaridad en momentos difíciles es una de las mayores virtudes que pueda poseer el ser humano. Un gusto haberte leído paisana, saludos hasta tu cálida tierra Zuliana.

 

Honor que me hace tu visita y comentario Kimbisero.
Gracias paisano recibe un caluroso saludo desde la tierra del sol amada.

 

Maravillosa obra,saludos

 

Agradecida de tu visita y comentario Sebastian.

 

Impresionante descripción de una de las catástrofes a las que nuestra madre naturaleza nos tiene acostumbrados. ¡Tristes y maravillosos versos! Un placer pasar por tu dolorosa pero bella poesía Mireya, saludos amiga poeta

 

Triste y agonico poema supongo que basado en algúna inundación de estas terribles que asolan este mundo. Como siempre tu manera de escribir es fluida y certera y logras transmitir ese sentimiento apocaliptico al lector, espero que toda esa buena gente haya podido rehacer su vida, Abrazote de jueves para mi amiga Mireya. Paco.

 

Gracias Daniel, un placer recibir tu visita y comentario.Describo tal cual ocurrió, recojo la voz de un niño-adolescente quien vivió la tragedia. Saluditos.

 

Gracias Paco, por dejarte llegar a estas letras, la verdad no hubiese querido recordar, yo no las viví en carne propia, pero si gente muy cercana por demás querida. Muy acertado comentario "apocalíptico", los sobrevivientes se rehacen la vida cada invierno. Un buen saludo para ti.