No me saben la frecuencia...

NO ME SABEN LA FRECUENCIA,
no me indican con el dedo,
no me siguen,
prosiguen o persiguen,
no saben que soy 1,
que me visto y sin embargo,
no me han visto,
que camino mirando a las estrellas,
y conforme yo camino voy oyendo la tierra,
escuchando la pisada de millares.

Tengo de metáforas truncado el intelecto,
Y un gran sopor continental reside en mi cabeza,
Y avanzo,
voy,
camino,
te murmullo,
te mastico 35 veces la frecuencia y,
se me caen
agrarias estridencias de la boca
repletas de diálogos absurdos,
centenares,
miles de millares,
y me dices que te diga,
y no digo,
y callo,
y prosigo,
sintiendo el intenso socavón de mil palas cavando mi tierra,
...................................y de arados torturantes
...................................y de estrictos chuzos,
...................................y de tristes azadones
...................................y carretas colmadas de caminos.

Inhóspitos senderos me recorren, de este a oeste,
de agrícolas hectáreas inundadas tengo el seño y,
pese a eso, sueño con la flora irreductible de tu beso,
de todos tus ojos regionales y de todas tus manos,
y todas tus bocas y todos tus labios,
tibios,
que al pronunciar campos enteros florecieron ambos ojos míos,
y a pesar de todo eso,
tengo grava el corazón
que en vez de late roca y me atraviesan ríos.

Yo nazco donde afluyen
....los hocicos incomprensibles de la habladuría barata,
y aparezco,
balbuceando maremotos,
sismos,
terremotos,
sepulcros cataclismos
en aullantes catacumbas terrenales.

Y he aquí que desembocan
tus óleos ojos en composición de mi suspiro,
que han venido a ararme el signo,
trillarme la palabra,
sembrarme el terreno baldío de recuerdos de dos días,
ahora,
que descansas tendida en las estrellas,
mujer suave,
tibia,
intensa,
rauda como un trazo de paráfrasis florales,
calma ,como noche repleta de canto de grillos,
ruda como el rugir agreste del sur todo,
tierna, como un campo repleto de cultivos;

beso a beso,
yo te tiendo sobre el lienzo de mi noche
y te acaricio lo inmensa, codo a codo,
lo mundial,
continental,
universal,
lo fémina siniestra dulcemente,
remembrando, pecho a pecho,
la docencia gigantesca de tu habla,
tus modos elegantes como álamos alzándose hacia el viento,
cosechando mi palabra;

.....................y entre viejas bancas plazolescas
y accidentados paisajes comensales,
clamando geografías,
se me caen terremotos de los ojos
y me ahogan catastróficas salivas siderales,
porque
no me sabes la frecuencia,
no me indicas con el dedo,
no me sigues,
prosigues o persigues,
no sabes que soy 1,
que me visto y, sin embargo,
no me has visto,
que camino mirando a las estrellas
y conforme yo camino,
voy oyendo la tierra,
escuchando la pisada de millares,
y sintiendo el terrible galope de hipotéticos

.......millones

.............de caballos.