Noche de pasión

Todavía recuerdo con añoranza
aquella bonita noche de Abril
en que nos fuimos a la cama
y me cubriste con besos mil.

Recuerdo perfectamente tu cuerpo
tembloroso en la habitación,
la pasión se torno en fuego
después de un strip-tease guasón.

Tú querías la luz a oscuras
yo encendida para vernos mejor
quería ver tus estructuras
dentro de la batalla y del fragor.

Tus pechos erguidos
apuntaban como una lanza
tus suaves caderas
preparadas para la danza
tus calidos labios
de los que no deje ni gota
pasó todo tan rápido
que me pareció una derrota.

Pero la noche era joven
y después del cigarrillo
volví otra vez a acariciarte
como ciego sin lazarillo.

Ahora tus besos sabían mejor
ya sin prisa por devorarnos
esperábamos a que mi erección
estuviera lista para el segundo acto.

Fue una noche de pasión
memorable para los dos
cuando habrá otra ocasión
en volver a fundirnos juntos
poder repetir la función
dormir poco y abrazados
ver el amanecer juntos
y desayunar chocolate con churros.​

 

Pasión, chocolate, hermosura divina.