Palabras de un asesino

¿Me imaginaste matándote
todas las veces que nos besamos?
Cuando te miraba a los ojos
no veías el brillo
de mi empuñada pupila
ni menos te sangró la boca
con mi afilada lengua.


Caminábamos por las calles
y tras tuyo las sombras de los árboles
te apuntaban con sus grandes ramas.
Pero siempre te sentiste protegida
y nunca miraste para atrás.


Mis dedos corrían por tu vientre
y mis huellas digitales
dormían en tu ombligo.
Eres tan cómica
Podía extrangularte con tu propio pelo,
Y tan dulce
era adicto a tu sabor.


Lo cierto es que te protegí
todo lo que pude
te protegí de todos
excepto de mi.

 

Describes perfectamente al amor que seduce y domina...y es que el asesino -supongo- no alerta sobre si mismo.
He disfrutado leerte
EStrellas y saludos
Ana

 

Uf tienes toda la razón... el amor dominante y manipulador! cariños y gracias por leerme