Para siempre... (Dedicado A Vos... Mi sacro amor...)

"En cada verso y en cada línea, cada noche y cada día, os perpetuo, ¡amada mía!... Son mis marcas y señas de identidad reflejadas ¡en estas letanías!... En aquellos pasajes de vuestros versos, por mí venerados, y en aquellas imágenes jamás por mí soñadas, en todos vuestros silencios y en vuestros gritos reprimidos... En todos y cada uno de ellos, ¡me doy por aludido!... En esta sublime historia que un relato de hadas pareciera... y en el que quizá no hallaremos ¡conclusión alguna!...

Para siempre…
(Dedicado A Vos... Mi sacro amor...)




¡Reveláos!...
entre la luz y la tiniebla,
entre la moraleja de vuestros versos,
¡os ordeno!... desbocáos cual diva,
entregáos a vuestro antojo... ¡adictiva!;
Prisionero sin duda me presiento
del desconcierto y anarquía
a los que vuestros versos me incitan.

Por vos, juré inmortalizar...
el trance gestado en una oda,
el delirio hecho poesía,
el instante mismo... ¡de nuestra orgía!;
dama leal, os eregís en mi mecenas,
suplicáis empero ¡vuestra condena!

De vuestras estrofas trofeo seré
el más preciado... ¡de vuestro palmarés!,
que ante vuestros propósitos se inclina,
entrega, desploma y despeña,
alucinando y disparatando
¡ante el éxtasis de vuestras estrofas!

¡Ajusticiadme!, otorgándome el alivio
de penetrar... ¡vuestro anhelado delirio!,
de esta furia e impulso desenfrenado;
¡confinadme!, en vuestra celda sin candados,
sin que aflore la coherencia,
sin que haga ¡acto de presencia!,
¡hurgadme!, y delirad, sin ningún reparo,
ante el asedio e insistencia
que os conmueve al adoraros.

Por los mitos de los mitos,
por los dioses de ceremonias y de ritos...
nuestras almas unidas, fundidas y rendidas
en esta arrebatadora antesala,
en vuestro auxilio hago escala,
y no hay mayor dote para este demente
que el de amaros para siempre...
​

"... En los silencios contenidos de mi corazón, y en los gritos que azotan a mi razón; en todas y cada una de las insinuaciones que hallo en tus versos ¡te adoro, amor mío!...
En cada rincón y en cada vertiginosa estancia de vuestro alma podréis sentir, por siempre, los desgarradores alaridos que mis letras dejan escapar... Son los aullidos, de este lobo malherido, ¡que a su presa reclama!..."

Strigoyu (José Antonio)
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8 Julio 2010​

 

precioso poema, todo se lo das a ella, todo dedicado a ella

curioso pseudonimo, strigoyu, un poeta demonio

un gusto leerte