Paragate. El silencio del tigre.

Paragate. El silencio del tigre.
A Shi Heng Yi, maestro de shaolín, gracias.​

Un soplo del tiempo congela los exteriores
y entonces ya no existo, soy todo, soy rayo
un silencio que colma el rostro del destino
que quema todo miedo al infinito, al abismo.
La mano que sacude el cristal blando un viento
ni un solo alma se escapa de mi cuerpo,
nada existe en mi espíritu de fuego
como el tigre que caza como ave.​

Como el tiempo.​

Todos nadaremos al ocaso,
y moriremos en un sol de sabios
no hay porque morir para siempre
pero pertenecer a todo lo viviente.​

Vida es espíritu.
Paz es garra.
Garra es calma.
[FONT=Times New Roman]Cuerpo es nada.[/FONT]​

 

Escribiste unos versos reflexivos, toda una filosofía de la vida anclada en la espiritualidad. La última estrofa es muy aforística.

Saludos, Waldo.