Por qué me acaricias, y después no

Es egoísta. O es normal?
Mi propia infravaloración
El tiempo castiga
Sin tu supervisión

De promesas y de la paciencia
Sin ser ella madre de nada
Yo, al contrario. Para ti viceversa
De mis anhelos parricida

Por qué me acaricias?
Por qué me denuncias?
En mitad del océano un día
Al otro, lagos de ensueño a la vista

Me estoy muriendo
De no estar a ti atado
Sigo sin distinguir la realidad
El sol no saldrá para ver qué clase de aguas

Lo que crea y lo que sea
Moldeado con tus palabras
Pueril acto el de amenazar con morir
No es mío. Es tuyo. Por qué formas parte de mí

Después del tiempo
Solo hubo un antes
Te conocí y me enamoré
Y ahí supe que estaba creciendo

Ya era viejo, y me puse a envejecer
A ti te dio igual. De lo que se decía
Transitoriedad como acto que no renace
Como nula, cuando estamos juntos, la apatía

Para mi eres la eternidad
Un entretenimiento para mi hice que creyeses?
Si en mi floreces biología de notoriedad
A pesar. Solo soy si te llevas hasta mis raíces

Eres el típico jersey de lana de Hollywood en navidades
Que nadie quiere, pero actores coinciden en hacer que les guste
Quiero ponerme de acuerdo contigo en hacer cada día del amor una maestría
Convertir lo abstracto e incierto, en luz del sol al alba, sin cuenta regresiva

Sin hipocresía, con auténtica sorpresa como lema,
Sin apariencia del día a día como ciencia de la mentira
Puede que nunca te tenga, y solo tú eres culpable de mi disimulada indiferencia

Te lo diré todo a la cara
Y hare lo imposible por hacerlo a nuestro alrededor
Para que donde pises, prescindas de tu interior tormenta