Pronóstico para poetas (fragmento)

Aquella tarde estaba en el vaivén de enseñar, pero ella se marchó
Nuestro encuentro fue breve
Y me quedé con el gozo de probar su gozo
La vi alejarse hasta hacerse sombra
Se me perdió como el espacio
que disipa (en Sierra Guadarrama)
las estrellas del amanecer
Apenas escudriñé sus palabras
Mansas. Desenfrenado pulmón de versos
Hoy juro por Nuestra Señora de la Fuencisla
que… esa tarde… en Segovia… yo no lo sabía
Pero desde que el amor se hace cómplice, empiezan desasosiegos.

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