Siempre hay un final

SIEMPRE HAY UN FINAL

Gotas de agua roja,
caen de las heridas que arrojas
en mi piel intacta, con alma rota,
¿no las ves?, pues escucha a mi boca.

"El tiempo pasa lento,
y dime tú de qué sirve ser siervo,
si ni de mi cuerpo soy dueño,
pasan los años y yo ya ni los siento.

El corazón decide de quien enamorarse,
no vale la pena luchar contra lo que haces,
corazón creyente de que lo mejor es marcharse,
y yo, ateo, renegando de todo lo que encontraste.

Cerebro preguntando si es correcto,
el mejor error fue acertar en el consenso
de lo que decidieron mis sentimientos
sentimientos sin sentidos y que ahora están muertos.

Aún estando a mi lado, te siento lejana,
y es que te veo translúcida, como un fantasma,
no lloraré, porque las lágrimas no valen para nada,
prefiero sangrar el dolor que dejaron tus llamas.

Prefiero callar y no decir lo que es cierto,
no me lo tengas en cuenta, porque tengo miedo,
por no querer dañarte, dejé de ser sincero,
y aquí estamos ahora, fríos, y no es invierno."

Pero sonrío, porque volverá a pasar,
solo espero el momento en que sucederá,
y, sinceramente, me da igual,
pues será otra historia con final.

 

Me ha gustado tu poema, poeta Chikebox. Un gusto leerte, saludos.
Azalea.

 

Muchas gracias Azalea, me alegro de que le haya gustado mi poema, son reflexiones de lo que les pasa a muchas personas, y estoy seguro de que mucha gente se sentirá identificada.