Signos infectos.

Leyendo los olvidos,
me acuerdo de que existo,
vociferan los celestes pájaros
de la imaginación,
revolotean,
tratan de asustarse a sí mismos.
Cansado del devenir,
esperando el azar.
¡La suerte no es divina!

En la xilografía de tu piel encuentro
mi nombre en jeroglíficos
que tratas de borrar con el sarcasmo.

Quizás juegas con tus responsabilidades
y sin habilidades sollozan tus palabras
con el sol.

Una hormiga de miel muere en el episodio
en el que una pluma violenta
los rayos infrasónicos
de una luz deíctica.

Repeticiones de lo habitual,
de lo colectivo
y de la buseta que espero para irme
a los confines de lo absurdo.

La manzana que envenena un cuento,
o el mango que amarga mi corazón,
¿será el fruto que devoro con ansias
de entendimiento?
Igual todo terminará
en esa letrina saturada de tiranía.

Soeces letras salen de tu boca,
enfermas el sistema de un calendario,
corrompes el signo de tu cripta,
o mejor dicho:
¡De tu boca salen signos que contaminan a los hombres!

​

 

Gracias amigo por la visita a mi poema, es un placer poder disfrutar de tu presencia, gracias por la interpretación lírica, saludos, que pases bien y chispas estelares a tu pluma---

 

Dejo la huella de mi paso por tus bellas letras.

 

Gracias Jorge por la visita, saludos, cuídate, que pases bien y chispas estelares a tu pluma---

 

Leyendo los olvidos,
me acuerdo que existo...

Precisamente y no sé por qué, hoy estoy así.
leyendo olvidos,
igual todo termina en las palabras que escupe mi boca.

Estrellitas armoniosas.​

 

Gracias por la visita, es un placer poder disfrutar de tu presencia, aunque no es obligación que me leas, saludos, que pases bien y chispas estelares a tu pluma----