¡Sin ti me ultimo iracundo! Décimas.

Sin ti no tengo estatura

ni mi andamiaje sustento;

sin ti se activa al momento

la más tétrica amargura.

Sin ti mi boca insegura

se me hace impar y se pierde,

se reseca el prado verde

y la rosa se marchita.

Sin ti nada se infinita…

y todo lo eterno muerde.


Sin ti sucumbe el poeta

ante este andar cotidiano;

sin ti me vuelvo inhumano,

desorientado y veleta.

Sin tu beso en mi gaveta

no quiero cama ni noche;

sin tu aliento no hay derroche

que me lleve a lo querido.

Sin ti me aturdo perdido

vagando como un fantoche.


Sin ti carezco de todo

y a soles me vuelvo nada;

sin ti caigo en la hondonada

ajado y preso del lodo.

Sin ti el sol de mi acomodo

amanece tan nublado

que mortuorio y domeñado

por tan negra tesitura

me hago sed en la espesura

oscurecido y cansado.


Sin ti no soy ni yo mismo

ni tiene risa mi boca;

sin ti el amor se equivoca

transformado en egoísmo.

Sin ti aparece un abismo

entre mi Dios y este mundo,

me convierto en furibundo,

desahuciado y prisionero

y en un lecho lastimero

me desangro moribundo.


¡ Sin ti me ultimo iracundo!

 

Eso me pasa a mí, con el tabaco. No lo puedo dejar.

 

Nommo, gracias!!! Jajaja

 

Un verdadero placer pasar y disfrutar de tu poesia , un abrazo afectuoso desde chile , saludos poeta .

 

Muchas gracias , jalvarez. Saludos cordiales.