Todavía un hombre

Volveré a las calles
A las noches
fauces del ruido con maquillaje y billetes de a.

Y esta vez será en dólares manchados.
De vacío.

Todavía soy un hombre
Puedo morderle una nalga a la luna
Hacer que sienta.

No, no es la primera invitación que se me ignora.
Ni la serenata que.
El amor que se desprecia.

Duelen tus ojos
Arden tus caderas maduras y con otro.
Duele el pequeño afecto que se va. Duelen
Tus SMS
como arrancados apenas
(a duras penas)
Jode pensarte ajena.

Todavía, a fe mía,
soy un hombre.
Volveré a las luces
A la mirada alerta
A la venta de conversaciones

Volveré al mar.

 

Todavía un hombre? Mosca pues! No me salgas con un comentario sobre los tiburones porque ahora ando pendiente del fútbol !! Buenos versos hermanaso.

 

¿Qué nos hace ser lo que somos, Alma de Lobezna? ¿Por qué nos decimos "hombre" o "mujer"? Yo he tenido que ceñirme a la experiencia, tal vez al aguardiente caro y siempre sospechoso de los bares, a la mirada mentirosa de la buena muchacha en venta, o al combate que hay que sostener contra la mediocridad y la miseria en cada una de las facetas importantes de la vida... para vivir viviendo. Para saber que la vida en realidad existe y no es -realmente- un engaño morboso y en extremo cínico de la muerte. Para ser poeta, pues, y ya.

No puedo, joven mujer bella, sino enviarte un beso volado como un pelícano. Tal vez, no sé, puedas recogerlo en los muelles, la costa, de Buenos Aires. Si es que pasas por ahí. Y un agradecido GRACIAS.

 

Usted sabe demasiado bien, mi alto pana, que los Tiburones este año si es verdad que no van a dejá pa nadie. Por cierto ayer me calé el partido contra Dominicana por el cupo a las olimpiadas y lo que terminé fue deprimido. El fútbol como deporte me encanta, pero me solivianta, sin poder evitarlo, toda la trampa que permite; ni el boxeo profesional es tan sucio en el fondo. Hasta el famoso VAR es tramposo. Se nota que es un deporte inventado por gente falsa, de doble moral, es decir, totalmente inmoral. Cuando se le quite toda esa suciedad -si es que se le quita... las vacas sagradas de Europa lo quieren tal como está- será un deporte mucho más atractivo que ahora.

Casi me olvido de saludarte, mi broder, y de agradecerte tu paso por acá. Todo lo bueno para ti. Y con todo, yo también estoy ligando a la Vinotinto. Del otro lado del mar, pues que gane el que sea.

 

Muchas gracias, Isabel.

Siempre, sí...

Un abrazo grande, hermosa.

 

La vida nos pasa y nos llevando a su vera, siempre nosotros en nuestra esencia luchando,
pero a veces nos sacude el vendaval y nos tambalea. Pero todo pasa mi niño, lo sabes.
Gracias por esta íntima y hermosa confesión de vida, por compartirla en el foro para
poder disfrutarla. Besitos cariñosos apretados en tus mejillas.

 

Muchas gracias por haber estado aquí, Ana Mercedes. Disculpa lo tarde, cada vez me está costando más conectarme.

Un abrazo grande.

 

La construcción de las masculinidades tradicionales está en entredicho, muy justamente a mi parecer, y sobre todo en su relación e interacción con el interés amoroso. En realidad esto poco tiene que ver con tu poema, pero recupero esta idea porque ese cierre de tu poema me parece fantástico: la masculinidad -el ser hombre- como reencuentro con lo que nos hace humanos, representado aquí por la fascinación del mar.

Me fui por las ramas, pero es porque fue una agradable lectura, fresca, sincera y sentida. Muchas gracias, amigo César por compartir.

Saludos cordiales.

 

¿Qué tal, mi compa? ¿Cómo está tu México, cómo va la vida?

Gracias por tus apreciaciones. Son absolutamente válidas, tanto lo de las masculinidades como lo del mar. En última instancia, es a ser humanxs, humildísimas, pequeñísimas criaturas del universo (o de los universos, si lxs estudiosxs de la Física tienen razón) lo que tenemos pendiente aprender a ser.

Un trago de buen brandy a tu salud, mano. Que estés bien.

 

Estimado amigo-poeta César, que gusto me dá leer sus versos, destaco estos que me encantaron,
abrazos de colores en la distancia,

 

Coño, Lupe, me batió contra el piso ese fragmento de poema que colocaste como colofón a tu comentario. Qué intensidad tan sentida y hermosa.

Que la vida te guarde siempre, compañera. Bella!!!!!!!

 

A estos me refiero.

 

Por fin como que me va a salir. Disculpa mi ineptitud para el manejo de estas cosas tecnológicas.

 

ja ja ja ja no te preocupes, muchas gracias por notar lo que he hecho, se te abraza estimado amigo...abrazos de colores

 

Siempre que amanezcamos con vida tendremos la oportunidad de volver. Sea al mar, la montaña, el río, la opción es nuestra, y de poder continuar, es del milagro. Y así duela, a medida que vamos dando pasos el dolor será menos perceptible. El género sólo distingue, pero a la larga se siente igual.
Tú volverías al mar, yo haría lo mismo.

Otro gustazo leerte Julio César!
Abrazos!
Camelia