Trascendencia: Escribiendo para mi mismo...

Amanece...
Cada nuevo día pudiera ser el último.
No son malos pensamientos,
ni estoy gravemente enfermo.
Acepto que llegará alguna vez el último día,
y tendré que irme, quizás de repente,
pero confío que no sea para siempre...

Quizás regrese algún día a otro mundo,
pero quisiera que fuese en este:
Vendré con otro cuerpo y otro rostro,
y quizás con la misma mente...
Realmente perdemos gran parte de esta vida,
aprendiendo desde cero lo que seremos,
Mejor nacer con conocimientos enlatados,
como pequeños genios del inmenso universo.

Imaginemos entonces que mi obra de hoy trasciende,
(por qué no... quizás ya he trascendido en otros tiempos)
y mi "Yo" del futuro la conoce un día,
y descubre este poema de repente,
sin saber que fue escrito con el propósito oculto,
de ser leído por mi mismo,
después de mi muerte...

Frank Calle (3/ nov. /2023)

 

Y tal vez, ¿porqué no?, ya lo habías escrito antes, con otro cuerpo y otro rostro, pero no lo recordás.
O tal vez, ¿porqué no?, lo "recordás". Y por eso ahora lo escribiste. O reescribiste.

Un agrado leerte, paisano de América.

Un fraterno saludo, extensivo a la patria de Martí.

Lisandro

 

Buena reflexión, amigo Lisandro, por algo la poesía es la Reina... Ningún artista puede imaginar y después hacer, lo que puede hacer un poeta...
En mi caso, disfruto haciendo viajes al pasado (al futuro dicen que es peligroso...) hasta montado en una alfombra mágica, que nos presta Aladino...
Y ahora en serio... la poesía es el más perfecto escape para hacer, que no sea solo pensar. Es la manera perfecta de luchar contra la soledad, y con pocas palabras.

Un abrazo,

Frank
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