Tres cosas

La primera:

Pobre del sanitario
que en la palabra
cáncer vea muerte.
No hace nada más
que corroborar
su incompetencia
y su fracaso.

La segunda:

Maestro,
no es aquel que tiene
que enseñar
porque le pagan
para ello...
Mi maestro
es del que aprendo
y me da igual
¡que no le paguen para eso!

La tercera:

No hay ser más ruín,
que aquel al
que le otorgan el poder,
y lo usa con los que
le aportan dinero.
Dejando en la estacada
al que lo necesita,
sin remedio.

¡Ni eres doctor, ni eres maestro!

 

Letras tan llenas de impotencia como de verdades!
Tres puntos claves para la vida de cualquiera, salud, educación y sociedad, inmersos en tanta cloaca que hacen que me sume a tu grito y se me llene el alma de rabia, por tener que compartir el aire con seres que no saben ser gente!
Aplaudo la fuerza de tu denuncia hecha poema!
Besos,
Chiqui.-

 

Cuarta cosa: si no se es humilde para reconocer las limitaciones o las debilidades, nunca será maestro mucho menos doctor.

Me gustaron tus reflexiones.
Saludos

 

Lo que acabas de escribir , es lo que me llevó a expresar esas tres cosas.
Me dejas impresionada con tu acierto
gracias por leerme

 

Guau! contundente y verdadero como tú

 

Duras letras llenas de verdades.

¡Desdichado aquel que utilice su saber para perjuicio de su semejante!

Buenas líneas Doria. Gracias por compartirlas. Un abrazo.

 

Gracias por tu visita