Tu voz

Me penetra una voz y yo sé que eres tú.
Invisible la palabra que de tu boca no escucho.
Es el perfume y el rostro, el labio entreabierto,
la mueca y la sonrisa quienes hablan, mudas.
Pero tu voz sigue aquí, en la memoria del tiempo,
en su jaula rota. El acento que dejas, la levedad
de un tono grave o la fugacidad de los agudos,
una interrogación no dicha, el misterio en la jungla
de un diálogo son el paisaje de mis días, mientras
la noche asoma. Y tu cuerpo que ya no existe,
solo la sinfonía de tu voz que interpreta en mi oído
las notas de una canción olvidada.

 

Muy buen poema me ha gustado.

Y tengo una voz que me ama, calma y da todo lo que necesito, celebrando las voces que en la distancia nos aman.

Abrazos de colores,

 

Hermoso poema, variado el uso de figuras que le proporciona todavía más nitidez y enigma a su obra. Saludos, Marcelo Aurelio.

 

La voz que queda como presencia, como la verdad total de lo que alguna vez -y para siempre- expresara.
Muchas gracias por tan inefable emoción, compañero Penabad.
Saludos cordiales.

 

Hermosas letras.
Un placer leerte

 

Es un precioso poema. Hay voces que quedan grabadas en nosotros para siempre. Tantas veces la volvemos a escuchar aunque sabemos que solo vienen del ayer. Un placer leer tu obra. Un saludo muy cordial.

 

Gracias, Guadalupe, por tu lectura y amable comentario. Un abrazo.

 

Gracias, Marcelo, por la visita y el comentario que dejas. Un saludo cordial.

 

Hermosísimo tu poema Ramón, pero no es secreto que me fascina como escribes
y que desfruto inmensamente de tus letras. Gracias!!! Te dejo mi besito cariñoso
que se apriete a tus mejillas.