Un beso anciano.

Líneas horizontales
vacías en mi cara,
lejos, cerca,
en ningún lugar;
la voz perdida
salta en el cielo
y mi aliento
se pierde en el suelo;

las manos se deslizan
ante el sol
por todo mi cuerpo;
por mis labios
que buscan con miedo,
con mucho temor,
la libertad de un beso;

y queda vacía mi boca
en ella navegan peces
heterogéneos jueces
juzgan mi usurpado beso;

y tu beso, escueto y vacío
ante lo espiral de la luz
se riega al descubierto
donde navegan sueños
en botellas de triple dimensión
buscando un lugar... un rincón

 

Es cierto: la ancianidad de los besos no tiene que ver con la edad avanzada. Dicha vejez se vincula al desamor.

Muy interesante. Mucho gusto y un saludo desde Buenos Aires.

 

Agradezco tu comentario siempre acertado, un abrazo.