Un corazón que sueña lujuria

Los sueños que se sueñan con amor son más bonitos
y te duran hasta que vuelva a atardecer,
hoy mis sueños hablan de que necesito
tener entre mis brazos una mujer.

Se van las montañas y se acerca un nubarrón
que se interpone esta mañana en mi espejo,
cuéntame si existe hoy en día alguna tentación
que no haya pasado por este viejo.

Ni cuento todo lo que sé ni sé todo lo que cuento,
algunos días soy parte y también juez
en este libreto que me invento
y que no es otra cosa que un vaso de café.

Mi primera meta sería comerme tus mejillas
y robarte un beso sin darte tiempo a reprocharme,
aceitar tu espalda con dedos de mantequilla
y con tu cuerpo antojarme.

De seguro ríes y murmuras que estoy loco
y cuentas a tus amigas que padezco de eterna agonía,
pero no te das cuenta que te hablo como un bobo
y que verte aquí es toda mi alegría.

No te tomes en serio las risas de mi boca,
antes has de saber que estás conmigo,
y que tengo un saco para guardar tu ropa
y un cansado corazón que sueña lujuria contigo.

De seguro ríes y piensas que he perdido mis sentidos,
pero resulta que tan sólo escucho el ruido
de mis pasos que al sentirte cerca se me alocan,
y sólo me queda un beso que se moja contigo.

 

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