Una estampa antigua

Mañana, cuando el reloj repita la maldición de esta hora,
un destino que no yo no elegí,
te conducirá al mundo que tu sí elegiste.

Me vestiré con mi sonrisa de visita
y, disfrazada de mujer antigua,
desplegaré, como homenaje a tu adiós,
un pañuelo blanco desde el andén.

Te imagino en una estación triste.
Te imagino dentro de un tren de vapor,
replicando a mi adiós
tras un sucio cristal opaco.

Mañana, cuando las manecillas del reloj
se empeñen en coincidir en este momento,
emprenderás el viaje de tu vida,
Y yo, desde la certeza de perderte,
simularé, como hago siempre,
que la mujer que sonríe
asume con indiferencia las despedidas.

Y, cuando el tren se pierda,
construiré un nuevo sueño
y borraré de mi recuerdo esta estampa antigua,
que ni siquiera es cierta,
que ni siquiera existe.

 

Como a una estampa clásica, como una pintura del adiós sin dramatismo. Así sentí a su poema, Ña Scarlatita.

Un abrazo.

 

Me encantó!! Son letras sentidas con suave dejo de amargura. Saludos!

 

.:.Saludos.:.


Una estación de tren triste, con los truenos de la creación del hombre humeando bajo un cielo opaco. Los cristales mugrientos, los sonidos de las vías y del griterío popular... y entre tanta estampa antigua, los rostros de dos personas presentes; la persona que se va y la que se queda, pañuelo en mano, haciendo gala de su indiferencia premeditada.

Me ha gustado muchísimo.
Un placer leerte,
Luciand.

 

Ahh...imagenes, imagenes...el simbolismo es especial en una obra poetica...porque despierta la imaginacion y los sentidos...Scarlata, (no se tu verdadero nombre) aunque nada puedo decir ante una poeta de tu valia y altura, permiteme decirte que adoro este poema...me recuerda mucho a una obra de Arthur Rimbaud que se llama El barco Ebrio...excelente esa despedida al tren...la lejania...la soledad...maravilloso, hermosa, una gran poema...

 

Gracias Ciela, eso intentaba, pintar una estampa clásica y sin demasiados dramatismos, me alegra sin te lo pareció. Besitos muchos y un placer reencontrarme contigo, Ciela.

Que gusto verte otra vez por aquí, Angel Oscuro... Hay suaves dejes de amargura pero también de esperanza. Besotes.

Gracias Luciand, me alegra que te gustara... las viejas estaciones de tren tenían algo mágico... Besotes muchos.

Gracias muchas Jcmch (yo tampoco sé tu nombre verdadero, jajaja), me halagan tus comparaciones y que te gustara... Muchos besotes y gracias de nuevo.

 

Relojes que marcan la hora H, estaciones, trenes que se van, destinos elegidos sin azar....esta vez no importa el adios...estampa antigua....antiguo, por el tiempo, poema scarlata...regusto añejo de buen vino son tus letras en este desván macerando a la temperatura exacta...buenisimas letras....
un beso de martes de insomnio

 

Millones de gracias por rescatar mi entrada aquí... cada vez que releo, recuerdo y los recuerdos valen más que todas las letras... Un secreto: esto estaba destinado a ser un cuento... se quedó en cosa híbrida... pero le tengo mucho cariño... Mil gracias otra vez y besotes.

 

Ésta si se me antoja una despedida serena.

Tus letras se reconocerían sin firma, Carmen, porque llevan siempre tu sello.

Un bsote.

 

Claro que es serena, Ana, porque es totalmente ficticia... vamos, que nunca en mi vida me he despedido de nadie en una estación de tren... tanto es así que la imaginé en blanco y negro...

Un beso bien grandote.