Una gota

Tan transparente, tan clara,
tan pura, tan redonda,
tan frágil y tan delicada,
sencillamente es una gota.

No hablo de una gota por placer,
sino que voy a hablar de mi amor,
porque son semejantes, ahora lo sé,
así que hablemos de amor sin temor.

Tan transparente,
porque se demuestra lo que se siente,
y consigo ver todo, como en una lente,
tan bello, y a la vez, tan convincente.

Tan clara eres tú,
como el cielo es azul,
tan brillante que no existe similitud,
iluminas tanto, que al lado tuyo se oscurece la luz.

Tan pura eres,
como con el tiempo tierna te vuelves,
siempre fiel y sólo con mis abrazos y placeres,
ya podrían aprender de ti el resto de mujeres.

Tan redonda es mi vida,
cuando estoy contigo y tu sonrisa,
mi ánimo se viene arriba,
con sólo saber de ti y con ver tu carita.

Tan frágil como un cristal,
y con miedo a poderlo estropear,
hubo grietas, pero las supimos arreglar,
y gracias a eso cada día te amo más.

Tan delicada y tan femenina,
sencillamente, eres mi niña,
sonríe, porque así es como me cautivas,
y tus dulces ojos me dicen que sólo eres mía.

Sencillamente es una gota entre mil,
pero especial para mí,
porque sólo te escribo a ti,
porque nuestra gota, es así.

 

Bello, hermoso, un poema precioso muy bonito, una divinura.