Vives en una mentira mental

Finjo ser inmortal, cuando ni siquiera soy un mortal.
Creo conocer el misterio, sin conocer el secreto.
Intento huir del dolor, pero no conozco el amor.
Con un golpe inocente, modifico la historia de la humanidad, y me convierto en lo que nunca fui.
Todo es posible en mis actos, pero no en mi mente.
Soy la envidia de mi propia vida.
Esto se llama hipocresía.

Tú no eres más que una santificada hipócrita.
Atada al yugo de la tradición, educada para ser tu propia perdición.
No eres más que una pura hipócrita.
La máscara es tu exterior e interior, ella te atrapa en tu dependencia.
La independencia en ti no es más que vivir otro día para intentar ser feliz.
No nombres la muerte mientras disfrutes de la cicatriz.
No sabes lo que es perder, ni ganar.
Toda tu vida es una mentira mental.

 

Estimado poeta, me llamó la atención que escribes muy similar a alguien que conozco. Tus versos están llenos de dolor, de fuerza interior, pero de mucha rabia también, quizás por cosas que el personaje del poema desea decir pero algo lo detiene talvez por no desear lastimarla. Siento una encrucijada en todo ello. Un camino que él debe esclarecer, nadie merece creer que alguien le quiere y por otro lado sentir la espada de la hipocrecía en su costilla.

Creo que cada cual sabe ser feliz de la manera que aprendió o lo enseñó la vida y simplemente se debe disfrutar lo que se tiene con amor. Uppsss! creo que ya me extendí, disculpa, es solo una opinión.

Tu poema es una dura realidad pero no por ello menos hermoso. Sigue plasmando tu inspiración que ella es libre y nos deja llegar a donde queramos. Un saludo!