Vivo del verso pendiente.

Vivo del viento pendiente
por si destroza mi brisa,
por si montada en la prisa
se desboca boca y frente;
veleidoso y persistente
-puede que malhumorado-
cruel arrastre huracanado
lo mejor de mi presente.

Vivo del sol bien atento
por si el invierno me puede,
por si Lorenzo no cede
calor solar y alimento...
luz dorada, crecimiento
con los que enfrentarme al frío,
una pizca del estío
que dé playa y sentimiento.

Vivo velando a la Luna
para que vele mi verso,
por si lo ataca el reverso...
Selene es más que ninguna.
Su reflejo en la laguna
deja el cielo al descubierto,
vivo velando despierto,
despierto mezo su cuna.

Vivo cubriendo camino
con la señal de mis botas,
vivo con las suelas rotas
de tanto andar tras mi sino.
Vivo atento al asesino
que torvo carga mi bala,
vivo huyendo de la tala
que quiere hender mi destino.

Vivo del verso pendiente...
Pendiente estoy de su trino.

 

Bellísimo, me atrapó desde el título, mis estrellas.

 

Gracias Ludmila, por tus palabras y tus estrellas. Agradecido.