Ya

No sé si eres mía,
Te necesito y te amo
Extraño tus ojos

La ausencia duele
La existencia no vale si no eres mía
La canción me duele,
la fragancia de ausencia duele

No sé si regresas
Tu tormento es ser mujer
El mío eres tu, tu ausencia

No tengo oro, no tengo tiempo,
no tengo alma, no tengo hambre
no tengo calor, pasión


No eres el alma que me acompaña
no eres el silencio que escucho
no eres la eternidad que espero
no eres el tiempo que se va
no eres mía

Se borro tu figura gravada
Se fue el alma
Se fue tu imagen
Se fue mi existir

Se quedo la llave del refugio
Del santuario sacralizado
Del suplicio, del cortejo frió
Del circulo infernal
Del recuerdo atormentado
Del paraíso abandonado


De mi alma adjudicada
De mi cuerpo frió
De mi hambre
De mi llanto
De mi hijo
De mí

¡Llave maldita!
¡Maldita devoción!

 

QUERIDO AMIGO Y GRAN POETA CUEVANO, BELLOS VERSOS AUNQUE CARGADITOS DE TRISTEZA. ES MAS QUE UN POEMA, ES UN GRITO QUE SE SIENTE SALE DE TU HERIDO CORAZÒN. TE FELICITO POETA.


RECIBE UN :::hug:::


TU SIEMPRE AMIGA.


ANY VAUGHAN.

 

Ayyy Cuevano. Hay ausencias que desgarran, como tus versos. Todo me ha encantado, pero el final es simplemente grandioso. Solo una llave abre la cerradura, abrá que cambiar la chapa amigo. Preciosos versos de amor ausente. Me encantó.:::hug:::

 

En verdad esto que llamo poesía personal es mas un grito para sacar esos demonios que habitan dentro

Gracias Any Vaughan.

Un abrazo de tu amigo Cuévano.

 

Bueno "ya" llegue y dejo en tus hermosas letras un beso sabor a amistad...

 

Es un verdadero honor Gracias por tu comentario Azul Profundo.

Un abrazo de tu amigo Cuévano.

 

"ya " era tiempo que me vieran me sentía ignorado por las musas ...

Me dio mucho gusto saber que me lees. Gracias Guadalupe Cisneros-Villa

Un abrazo de tu amigo Cuévano.