Yo sé que será mañana

Canalizo tu existencia en mi presencia desesperada
aunque quizás no sepas que te busco
como busca el recién nacido el pecho que salva.
Te fuiste en medio del dolor de no poder hacer nada
donde nada es una palabra hueca
que comienza donde todo acaba.

No hay que ser creyente `para sentir
la cercana presencia que nos toca el alma,
en medio del dolor que deja la partida inesperada.
No hay que pedir permiso para trascender
desafiando las fronteras de los seres vivos,
que no saben que se han ido en la madrugada

Yo estoy aquí, o estaré allá,
No importa el lugar ni los motivos.
No importa estar muerto o estar vivo.
Estar es suficiente si la presencia
nos une en otros siglos.
cualquier día, sin mediar palabras.

Frank Calle(13/ agosto/ 2022)

 

Magnifica última estrofa,
ha sido un placer leer sus versos mi respeto en un beso de fresa

 

Muy agradecido, Guadalupe, siempre preocupa cuando uno explora caminos complicados, que a veces se aprecian de una manera que no era propósito el autor molestar creencias.

Un abrazo,

Frank
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Creo que comentas en otro poema, pero de todas maneras tu presencia más que esperada, es deseada.
El otro poema se titula "Ofreciendo disculpas":, que empieza así:
Divina es la poesía
que llega sin previo aviso:
entra, sin pedir permiso,
y no me puedo callar.

Un abrazo,

Frank
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No sé ni que decir, porque su comentario es tan cálido, que me deja buscando palabras. Yo estoy de acuerdo que el poema quizás no esté en el foro preciso. Yo medité al respecto, y no habría dudas para ubicarlo en el foro del amor. ¿Por qué entonces? En realidad llevo semanas metido de lleno en una serie que se adentra en el más allá unas veces, y en general está en la línea de "Experiencias cercanas a la muerte", donde la realidad es absolutamente onírica. Y este poema nace dentro de ese proyecto (de ahí la esencia de la primera estrofa) porque necesitaba desarrollar un poema de amor como quien vive exactamente esa experiencia, que cae en lo paranormal; pero al mismo tiempo va transitando hacia una realidad que puede verse como metáfora, o como un regreso a la realidad más surrealista.

En fin, para mi ha sido un regalo, en el sentido de haber logrado algo que necesitaba expresar, y al menos para mi tranquilidad espiritual, siento que he dicho algo que alguien, en esta vida o en el más allá, estaba esperando.

Siempre le quedo en deuda.

Un abrazo,

Frank
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