A un mojón (Soneto escatológico)

Despierto en la mañana no me apuro,
y enciendo un cigarrillo tempranero,
un café americano muy ligero
y al visitar el baño dejo un puro.
El mojón es un rosco seco y duro,
y ha dado a su objetivo tan certero
que atasca de la taza su agujero
manchando la escobilla aquél centauro.
Yo llevo esa liturgia diligente:
dejo un perfumador en el ambiente
que perfuma el retrete con su brisa.

¿Qué pasa si se acaba allí el papel?
para limpiar los restos del bagel
imaginen, a mí me da la risa…

PepeSori
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