Certeza

Camino la puerta franca
esa que sostiene el viento
viaja la nube en sensación
borrosa, medicamentosa
cruel de su incierta tinaja
de lo que pudo ser y llovió
al tiempo que el renacer
ausente se comió los cardos
y los abrojos sostuvieron el frío
bordeando la calle del pensamiento
que lleva yermo de apellido
me nace una gota de cielo
en el final sin comienzo
que lleva a tu encuentro
llevo un brillo de sol en los ojos
luz que incendia el resurgir
de los campos y fuentes de los tuyos
deseoso sueño que viaja
los confines se difuminan
la certeza es hoguera
y el muro de tu sentir cae preso
de suspiros enraizados
ojos ardiendo los ojos
que juzgaron y me nació un verso
que rimó el infinito del beso
avanza mi mente dibujando
bosques, montes, barbechos,
encinas, brezos, espinos, carrascas,
ramblas, ríos, manantiales, lagos,
arterias de mi sangre
esencias de la armonía
en magnitud sólo alcanzada
por quien ama este mundo
y ser vivo de él se siente
un hombre que desde niño
lo que más le llamó la atención
fue jugar con el agua pisando charcos
y amar la naturaleza
viendo increíbles los cardos
que brotaban en el asfalto de su ciudad
ve más entretenido robar semillas al campo
y criarlas llevándolas a plantas adultas
que mandar un whatsup
o utilizar un móvil
la sociedad y ciudad no entiende
y a él tampoco lo entiende
en esta vida se le clavó tu sentir
y los ojos juiciosos sólo de envidia
se comieron a sí mismos.

El Castellano