Cuando

Cuando la muerte acosa inexorable,
cuando el destino llega lacerante,
cuando la vida pasa en un instante,
piensas, si tanto mal es superable.

Cuando te llega la hora inevitable,
cuando al final termina tu alma errante,
cuando Caronte espera vigilante,
piensas que la vida es imponderable.

Vive el momento como interminable
busca en ti mismo lo que es importante
puesto que lo otro ya es irremediable.

Mira al mañana como muy distante
donde encontrar la meta impostergable
mientras la vida la andas vacilante.

Cuando tu estrella quede ya apagada,
cuando el destino llegue ya inminente,
cuando aparece el fin si es concluyente,
piensa en la noche como en la alborada.

Cuando la vida quede superada,
cuando la suerte espere tan silente,
cuando el pasado fuera un referente,
piensa que el sol comienza con la nada.

Vive y disfruta todos los instantes
pues no se sabe cuándo han de llegar
esos momentos turbios y distantes.

Solo te queda firme el esperar
ante los tiempos siempre rutilantes
de esta manera triste de acabar.


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Antonio Nieto Bruna
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