1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

El piyayo

Publicado por malco en el blog El blog de Malco / El solar de la palabra.. Vistas: 18472





EL PIYAYO


¿Tú conoces al "Piyayo",
un viejecillo renegro, reseco y chicuelo;
la mirada de gallo
pendenciero
y hocico de raposo
tiñoso…
que pide limosna por "tangos"
y maldice cantando "fandangos"
gangosos?

¡A chufla lo toma la gente
y a mi me da pena
y me causa un respeto imponente!

Ata a su cuerpo una guitarra,
Que chilla como una corneja
Y zumba como una chicharra
Y tiene arrumacos de vieja
Pelleja.
Yo le he visto cantando,
Babeando
De rabia y de vino,
Bailando
Con saltos felinos
Tocando a zarpazos,.
Los acordes de un viejo"tangazo"
Y, a sus contorsiones de ardilla,
Hace son con la sucia calderilla.

¡ a chufla lo toma la gente
y a mi me da pena
y me causa un respeto imponente!

Es su extraño arte
su cepo y su cruz,
su vida y su luz,
su tabaco y su aguardientillo…
y su pan y el de sus nietecillos:
"churumbeles" con greñas de alambre
y panzas de sapos.
Que aullan de hambre
Tiritando bajo los harapos;
Sin madre que lave su roña;
Sin padre que "afane"
Porque pena una muerte en santoña;
Sin mas sombra que la del abuelo…
¡poca sombra, porque es tan chicuelo;
en el altozano
tiene un cuchitril
¡a las vigas alcanza la mano;
y por lumbre y por luz, un candil.
Vacia sus alforjas
Que son sus bolsillos,
Bostezando los siete chiquillos,
Se agrupan riendo.
Y entre carantoñas les va repartiendo
Pan y pescao frito,
Con la parsimonia de un antiguo rito:
¡chavales!
¡pan de flor de harina!
Mascarlo despasio.
Mejo pan no se come en palasio.
Y este pescaito, ¡no es na?
¡sacao uno a uno del fondo del má!
¡gloria pura él!
Las espinas se comen tamié,
Que to es alimento…

Asi….despasito.
¡no llores, Manuela!
Tu no pués, porque no tiés muelas.
¡es tan chiquitita
mi niña bonita!..
así, despasito.
Muy remascaito,
Migaja a migaja, que dure,
Le van dando fin
A los cinco reales que costo el festín.
Luego entre guiñapos durmiendo,
Por matar el frío, muy apiñaditos.
La Virgen María contempla al "Piyayo"
Riendo
Y hay un Angel rubio que besa la frente
De cada gitano chiquito.

¡A chufla lo toma la gente!…
y a mi me da pena
y me causa un respeto imponente!

Autor:JOSE CARLOS DE LUNA (1890-1965)





EL PIYAYO.

Nornbre artístico de Rafael Flores Nieto, de origen familiar. Cantaor y guitarrista. En su juventud estuvo en Cuba, al parecer durante la guerra, y posiblemente en prisión, según se desprende de las letras de algunos de sus cantes. Alternó su dedicación al flamenco con la venta ambulante de diversas mercancias.

No habría trepado a la cima de la fama, de no haber sido objeto del poema que con su nombre compuso José Carlos de Luna. Otra creación con estrella. Lo malo es que El Piyayo no salió muy bien parado de él. José Carlos de Luna se permitió una serie de licencias poéticas tan amplias,que en realidad inventó unPiyayo que muy poco tenía que ver con Rafael Flores. Así por ejemplo, sí era reseco y renegro; perono chicuelo, pues disfrutaba deuna talla más que mediana.

El Piyayo era un cantaor profesional, con dejos profundos de artistapoco afortunado en cuanto a su trayectoria. Un personaje habitual en los círculos flamencos de Málaga, entrañable, simpático y querido. Enel rastro de su personalidad, además de ser un solitario recalcitrante, surgesiempre el recuerdo de sus extraordinarios sentimientos. Alfredo Arrebola, comenta así su figura y su arte: «Se ha dicho, entre algunos llamados flamencólogos, que el cante del Piyayo no llegó a tener calidad cantaora, y menos jondura. Debería analízarse detenidamente tal afirmación. Fue, al menos,un creador. Algo que tanto falta en esta época pródiga de cantaoresy no tanto de artistas. Nadie podrá negar que su cante teníala impronta personal, individual e inaudito. Él creó un cante: el cante del Piyayo. Su cante no fue, como alguien lo ha calificado, tangos del Piyayo, aunque así esté recogido en la discografía de sus seguidores, Se trata, efectivamente,de un tango de estructura irregular, que lleva, y nos recuerda a cada momento, los ecos de la carcelera y de la guajira. Esta forma de cante la empleaba El Piyayo para cantar letras de carceleras como también para los romances, aunque no perdiera nada de su esencia creadora .. Es tradición oral- porque todavía hay testigos oculares- que El Piyayo fue un buen cantaor de soleares y siguriyas. Y debemos pensar y admitir que estos cantes tendrían un eco especial en la voz del gitanísimo Piyayo… El Piyayo fue una verdadera y auténtica personalidad en el flamenco, pero da pena saber que los malagueños no han conocido bien a este celebre gitano, que pasó la vida cantando. El que los malagueños no hayan conocido bien al Piyayo es debido- sin la menor duda- a la confusión de un poema que compuso José Carlos de Luna sobre un gitano, pero de circunstancias totalmente distintas a las de El Piyayo. El gitano que retrata...

Cantaor gitano de nombre Rafael Flores Nieto y nacido en la Calle del Cañaveral del barrio del Perchel el 1 de Mayo del año 1.855.
Se sabe que estuvo en Cuba, que conoció algún calabozo y que durante su "carrera artística" tuvo como protector a don Fernando Carrera.
Se casó (¿) con La Chunga, gitana que vendía encajes, durante la celebración tres días. Este "matrimonio" duró solo un par de semanas, ya que los familiares de La Chunga se la llevaron a Estepona en un carro para trasladarla posteriormente a la Línea de la Concepción. Poco después se unió El Piyayo a La Hampona (L´Ampona, según el decir popular), gitana nacida en el Rincón de la Victoria (Málaga).
La vida de Rafael Flores Nieto transcurre en Málaga entre la venta de peines, que tenían como escaparate el bolsillo superior de su raída chaqueta, y sus cantes, que él mismo se acompañaba con viejo guitarro que hoy se conserva en el Museo de la Peña Juan Breva.
A los cantes del Piyayo no debemos en puridad llamarles tangos, ya que están configurados y definidos por ecos de carceleras y guajiras sobre una osamenta de tango irregular, cuyas letras el propio cantaor hacía, dándose con frecuencia el uso de la décima o espinela.



(Alfredo Escalada/07.08.2mil6)

A lesmo le gusta esto.
Necesitas tener sesión iniciada para dejar un comentario