Noche

Despreocupada me dormí
la noche brillaba en mí
los sueños inundaron mi jardín
y el pasado encadenaba mi latir

Mi alma se elevó al cielo
caminando por senderos de hielo
En la cumbre de la montaña
espera el amanecer como cada mañana

Pero esta noche estrellada
la luna cambiará mi mirada

En lo alto de las nubes
mi alma ve tu sombra
te das vuelta y me sacudes
por la magia de tu obra


La noche se vuelve mía
solo tu y yo en la lejanía
donde el obscuro tull del cielo
acobija nuestro encuentro

Mientras dos almas bailan
allá en el infinito
van despertando sin darse cuenta
el sentimiento mas bonito

Mi alma volverá cada mañana a mí
y al despertar brillará para tí
Mientras camino por la vida
intento desifrar este enigma

Allá a lo lejos veo una silueta
cuando más nos acercamos
más rápido respiramos

Al verte a los ojos comprendo
el mensaje de los astros
porque en ellos está grabado
nuestro destino entrelazado​

 

Querida turmalina, tu sueño describe una bella anécdota, que has entrelazado en estrofas, logrando hacerlo con bellas asonancias, algo quizá desordenadas o que no siguen un esquema prefijado, de métrica variable, con un lenguaje correcto, algo llano (me refiero a la carencia de metáforas), lo que mantiene el interés a lo largo del mismo, pero noto que falla un poco en la musicalidad o ritmo al recitarlo, por falta de análisis de los acentos internos de los versos.
Un abrazo,
edelabarra