Amores que matan

¡Despierta, abre los ojos!
No eres una baldosa
que, una vez pegada,
es mil veces pisoteada.
¡Quieres, puedes!
¡Sal del abismo!
Aquí tienes mi mano amiga.
No vivas más de rodillas.
¡Levántate y anda!​

AMORES QUE MATAN​

Estaba al límite de sus fuerzas. Hacía semanas que apenas si dormía y se encontraba al borde del agotamiento.

Desde varios años atrás su vida se había convertido en un infierno. Aquel que creyó su príncipe azul, tardó muy poco en convertirse en un sapo repulsivo y abominable que la humillaba, vejaba, insultaba y maltrataba. De puertas para afuera era amable, educado, caballero; pero cuando traspasaba el umbral de su casa se transformaba en el más temido de los monstruos.

El día que tomó la decisión de coger a sus hijos y marcharse, de no vivir ni un minuto más de rodillas; no había sido diferente a otros muchos días. Esta vez la excusa fue una comida demasiado caliente, otros días había sido una carne poco hecha, un frasco que no ocupaba su sitio exacto en el estante del baño, los niños llorando, riendo o chillando, mientras jugaban; daba igual, cualquier pretexto era válido para hacer que aflorara su violencia. Por no hablar de los celos, un simple saludo de buenos días a un vecino le hacía reaccionar como la más temible de las bestias.

Un sexto sentido, posiblemente, acrecentado por el instinto de supervivencia, hizo que se agachara milésimas de segundo antes de que el plato de estofado volara en dirección a su cabeza. No dar en el blanco lo indignó aún más. La agarró por los pelo, la arrastró, la abofeteó; y, sobre todo, le pegó allí donde no queda huella, en le estómago, en el hígado, en los riñones. Cayó al suelo inerte como un pesado fardo.
La dejó allí inconciente y salió dando un portazo. Sus dos hijos, tan pequeños que apenas tenían uso de razón, salieron de su habitación nada más oír que su padre se había marchado. Habían aprendido, a base de palos, a permanecer encerrados, mientras él estaba en casa, con el fin de librarse de sus arranques violentos.

Mientras el pequeño acariciaba la cara de su madre, llorando silenciosamente, el mayor, de sólo seis años, trajo agua fría de la cocina y le humedecía las sienes y la nuca, con el fin de hacerla volver en sí. Poco a poco recuperó la conciencia, su cuerpo era un puro dolor, pero no podía detenerse. Ya no cabía preguntarse ¿Qué soy? ¿Para que sirvo? o ¿Adónde voy?. En aquel momento sólo cabía sobrevivir.

Desde entonces su sueño era escaso y ligero. Se podía decir que, desde hacía semanas, dormía con un ojo cerrado y otro abierto lo cual la había llevado la borde de la extenuación.

Se tumbó en la cama y el agotamiento la hizo sumirse en un profundo sueño. Soñó que soñaba con un hombre amable, educado; alguien que la cuidaba, la mimaba, la admiraba. Un hombre que no la consideraba un objeto y sólo tenía ojos para ella. Alguien para quien no existían las noches de neón y alcohol; un ser inteligente, un caballero.

Unos fuertes golpes en la puerta y unos gritos que parecían sobrehumanos pusieron fin a su sueño. Corrió al cuarto de sus hijos que ya se habían levantado de sus camitas y, abrazada a ellos, se dirigió al teléfono para pedir ayuda. Los goznes de la puerta cedieron y sólo alcanzó a ver la hoja brillante de una navaja. Sintió como el acero se clavaba primero en su costado y después en su corazón, una vez y otra y otra.
Desde el suelo, antes de cerrar sus ojos definitivamente, vio a sus hijos abrazados, llorando, mientras decían:

¡¡Mamá no te mueras!!​

Un hombre inteligente nunca será un maltratador, sin embargo un mediocre necesita obtener, a base de golpes, la supremacía que su inteligencia le niega.


15/05/06

 

Excelente Relato....uno Mas Para Mi Coleccion Grande Anita La Mejor....besos Te Quiero Luz

 

Gracias una vez más querida Luz.

Un besazo.

 

lo volvi a leer y me sigue atrapando besos te quiero anita tu amiga luz

 

ANITA:

Cuánto expresas en este relato, cuánta verdad, impotencia, injusticia, vicio..tantas cosas, poetisa.
Las miserias humanas..la violencia, el desamor..tanto dolor causan envueltos en un círculo vicioso o un laberinto que a veces, la persona afectada cree sin salida..

Una obra excelente, digna de leer por su gran mensaje.

Te felicito y mi admiración va hacia tí.

Te envío un abrazo desde mi alma.

Mariela.

 

Ana, Anita...

Este relato, me ha dejado consternado y sin palabras.
Mi reconocimiento a tu prosa y a tu poética.
Un beso,

Luis Videla

 

Gracias Mariela por tus amables elogios.

Por desgracia, el tema es actualidad a diario.

Un beso

 

Don Luis no me haga ponerme más ancha que larga que no le conviene a mi exhuberante cuerpo.

Es un verdadero honor tenerte en mis inexpertas letras.

Mil veces, gracias.

Un beso

 

Ana. De verdad que concuerdo contigo...darse con este portal ha sido un verdadero gusto...para mi es igual...y mas si existen autores de tan ferviente espiritu y efectiva mano literaria como la tuya. Es fantastico este relato...aunque el tema este trillado nunca deja de ser un problema grave de nuestra sociedad...y con tu mente lo manifestaste de una manera sumamene sobria y...por supuesto...con esa sensibilidad y fineza que siempre te caracteriza...me da gusto poder establecer opiniones con escritores tan eficaces como tu...Te admiro enormemente...

 

Gracias Jcmch, muchísimas gracias por tus palabras.
No dejes de leer, ni de escribir, porque con el bien hacer que demuestras con tan poca edad, tendrás un futuro prometedor.

Un besazo. Te estaré leyendo.

 

Mi agradecimiento más sincero a Mundo Poesía, a los miembros del Jurado de la Musa y a ti, linda Julia.

Seguramente este premio es inmerecido porque mis letras no son gran cosa, pero, ya que me lo habéis concedido, quiero dedicarlo a la memoria de tantas y tantas mujeres victimas de los malos tratos en todo el mundo y a todos los hombres inteligentes que hacen piña con nosotras, las mujeres, para condenar tanta violencia. Un beso a todos.

 

Enhorabuena Ana!!!
Tu historia es tristemente muy real y tan actual, que me parece muy valiente que hayas relatado esta denuncia y que te hayan reconocido por ello..
Yo hace tiempo tambien denunciè esta intolerable situaciòn, y aunque no recibì el apoyo que esperaba, aquì te dejo mis versos para que sepas que comparto tu sentir... 1 Abrazo*

_El Final De Un Cuento De Hadas_

'Erase un vez que se era...
Una historia de cuento de hadas
un hombre ama a una dama
despuès de un romance se casa con su amada
la vida juntos amandose pasan
y fueron felices y comieron perdices...

Pero este no es el final del cuento de hadas
es el principio de una historia que no termina,
sino que cuenta la realidad que los libros no relatan.

Casada con la persona equivocada
ella le aguanta callada,
Cuando el amor es invadido por los celos
la relaciòn se convierte en un tormento.

El primer golpe le doliò
no dañò su cara pero si su corazòn,
el amor cede al dolor
el miedo de la siguiente paliza la paraliza.
Cada cicatriz la recuerda que no es feliz
que vivir asì es como morir.

En su agonìa se arriesga y escapa
rehace su vida dejando atràs esa mala etapa
pero su pasado la persigue, su maltratador la sigue
un tràgico final la aguarda, otra victima màs asesinada...

" Fue El Final Del Cuento De Hadas
*Un Cuento Real Que Se Cuenta
*En Cada Ciudad Cada Semana
*Es La Nueva Plaga " '

http://www.mundopoesia.com/foros/showthread.php?t=9356​

 

Gracias Angahara.

Ojalá llegue el día en que esta horrorosa plaga de sapos azules desaparezca.

Un beso

 

Me hiciste vertir alguna lágrima, y es hermos , triste, este relato, es tan común el "amor que maltratata", la lógica del amor..pero en algo no estoy de acuerdo, y es que no debe ser feminista, para ambos lados se batea. es decir, hay tanto hombres que maltratan como mujeres...Estoy de aucerdo ela mor construye, y bendice... un abrazo desde méxico .josé antonio.

 

Gracias preciosa Lore por tu comentario.

Un besazo.

 

José Antonio, no me perdonaría haber transmitido la idea de unos ideales feministas, sencillamente, porque no los tengo.

Creo en las personas, hombres y mujeres, en su igualdad y en el uso de la palabra y no de la violencia para solucionar sus diferencias.

Muchísimas gracias por tu comentario.

Un saludo desde el sur de España, casi al rayar el alba de una madrugada cálida.

 

Ufff ... Ana no veas como me he quedado con ese relato...lo leí dos veces.... y te juro que me he quedado MUY EMOCIONADA... es que niña como me caló todo eso que escribes!! No se que decirte...solo QUE MAGISTRAL...

Besos de tu amiga

 

Ana, no me perdono haberme perdido este espléndido poema - relato de, por desgracia, la vida real. Es magnífico en su fondo, desolador y esperanzador a un tiempo si sirve para sacar del pozo negro del maltrato a cualquier persona que lo lea... Es magnífico en su forma, narrativa firme y precisa, sin concesiones a la galería... Y magnífico porque es un revulsivo que transmite voluntad, rabia, coraje y ganas de vivir a quien lo lee, sobre todo si ha vivido o vive una situación similar.

Un fuerte abrazo

Adela

 

Gracias Pino. Si buscas en mi perfil encontrarás un poema que trata sobre el mismo tema y que se llama El Sapo Azul.

Un besazo

 

Gracias Adela. Ese es el objetivo, sacar del pozo desolador a cualquier persona que esté sufriendo esta plaga.

Lo escribí un día en el que oí una noticia en la que decía que la media mensual de mujere muertas a manos de sus maltratadores era de ocho. ´
Cómo le he dicho antes a Pino, también escribí un poema que se llama El Sapo Azul, si quieres puedes buscarlo en mis temas publicados.

Un besazo y gracias, otra vez, por pasarte por mis letras.

 

Ana, leí "El Sapo Azul" y te dejé el comentario. Ahora entiendo la estrofa que insertas al comienzo de este relato. Mi agradecimiento más profundo

Adela

P.D.: Quizás, Ana, y es una sugerencia, pudieras darle más difusión, porque nada tira más de una madre que sus hijos. Por ellos se sobrepone a lo que sea; por encima del miedo, la propia estima, la angustia, la incertidumbre... Incluso al propio instinto de supervivencia.

 

Perdona Adela, se me había pasado este comentario tuyo.

Yo no tengo los medios para darle más difusión. A los españolitos de a pie nos cuesta mucho acceder a los medios de comunicación y si alguna vez lo conseguimos (yo lo he conseguido en un par de ocasiones) es simplemente porque suena la flauta y a ellos en esos momentos les interesa lo que contamos.

Un besazo

 

Ana, no había leído esto es impactante y pensar que es el pan de cada día de millones de mujeres. Perfectamente narrado y cargado de sentimientos. Que final más triste, como la realidad misma.
Un abrazo Amiga.:::hug:::

 

Gracias Ale...por desgracia es el pan nuestro de cada día...hoy otra nueva victima en España y van más de cuarenta en lo que llevamos de año ¿Tan torpe es la sociedad que no es capaz de ponerle remedio a esta plaga?

Un besazo.

 

Me Gusta Mucho Lo Que Escrives. Yo Soy Nueva En Este Sitio, Pero Al Igual Que Tu Me Encanta La Poesia. Liberar Esas Emosiones Que Guardo Profundamente En Mi Corazon.

 

:::banana:::

 

Te pìdo excusas por la tardanza en agradecerte tu comentario.

Aunque algo tarde te doy la bienvenida a MP.

Un beso desde el sur de España.

 

Gracias por tu siempre oportuna denuncia. Es un relato real.

 

Sí, por desgracia es una realidad de actualidad diaria.

Gracias por tu comentario.

Un beso