No queda nada.

Aquí no quedan miradas que encandilan
ni enormes hogueras que estiran las sombras.
Es día de un ayer que busca precedentes
encontrando el solo antecedente de la lentitud.

Cada sol que cae en el mar es diferente
como cada luna que alumbra la noche.
No hay en nosotros más que la calidad de efímeros
y depende de nosotros que hacer con esto.

Sin embargo tanto caemos para no levantarnos
tanto simulamos para no vernos en el espejo.
De tantas maneras nos vendamos los ojos
para no ver lo que hay frente nuestras narices.

Espero que alguien tome tu mano ahora
y en su boca puedas reconocer tus besos.
Hay que intentar que cada mirada tenga una mirada
en la que no se sienta vacía y desolada.




















(Dedicada a la mujer que por 2 años y medio me acompaño con tanto amor, quizas sin que yo supiera querer.)

 

Excelente me gusto mucho el sentimiento y la sencillez de tus versos
un gustazo leerte amigo

 

Estupendo! es la primera vez que te leo bueno asi me parece y se me muy buen escrito...Desde mi mundo abrazos tricolor,

 

Señora, usted a leiso y contestado amablemente varios textos mios, sucede que no soy muy adepto al portal y quizas por eso no me recuerda.
Gracias por sus conceptos.

 

Esa última estrofa es soberbia.
Mis cinco estrellas y un abrazo para ti,

 

Y que linda es la soberbia cuando se le da un buen uso!