La Noche

En una noche lejana a esta, una diosa se embriagaba con el néctar de la noche,
El roció se mezclaba con la dulce lluvia de sus ojos; enloquecida de pación y nublada de amor se desvanecía entre la bruma de la noche.
Lentamente su cuerpo se movía como si quisiera desaparecer en medio de las sombras, y sin remedio repetía no te alejes, no dejes mis sueños encendidos sin el fuego de tus ojos.
Mas lejos aun, una silueta la observaba, como si estuviese paralizada en el tiempo ó como si respirar no necesitara.
Se mantenía impávida e inmóvil, capturada por el dulce clamor de la diosa; cuando el espíritu de la diosa le dio el impulso de caminar, anduvo lentamente hacia un matorral donde la figura se escondía y en cuanto la diosa estuvo cerca,
La figura exclamo – Aquí estoy – de donde salio esa voz, pensó la diosa – Aquí estoy- te estuve escuchando y por fin estas cerca mío, deja que mis alas te cubran y que mis ojos te muestren los confines de la pación, y de tus ojos jamás brotaran ríos de tristeza ya que de los míos jamás los he visto salir, déjame embriagarme con tu esencia y a cambio te doy cada latido de libertad, libertad de materia. Libertad de esencia, y la sed insaciable de ser nueva cada noche vida mía.
En cuanto las palabras se hubieron terminado, ella se dejo tomar entre sus alas, y su esencia entrego, a cambio torno dolor por locura y llanto por sed de tiempo, y amor por pasión, que lleno sus horizontes de abismos de libertad.​

 

Es un buen relato fantástico. Te recomiendo lo publiques en Mundo Prosa, hay que corregir la ortografía.
Saludos,:::gafas1:::