Paranoia

Había huido de mi el día,
lo se porque era de noche
o por lo meno estaba como si lo fuera,
de lo que si creo estar seguro
era que todo estaba patas para arriba.

Como cucarachas fumigadas
boca arribas destrabando el aira con sus patas
y para serrar con broche,
ya no me importa si es de oro o parece oro,
se me aparece un espíritu.

El condenado donde sea,
no estaba en su lugar o donde debería estar
y andaba tan elegante que sorprendía,
aunque a mi me espantó,
de repente y con cortesía preguntó.

Oye donde está tu alma ?
estaba espantado aunque todavía
seguía ahí tieso y frisado,
temblando pensé fríamente y llamé al ratón,
que no aparecía en parte.

Entonces llame al gato
que estaba en un rincón lamiéndose las garras,
y muy bien pensé sobre esa situación,
maldición el jodido gato se comió al ratón
porque se esta chupando los dedos.

Ya no podía más
con tantas complicaciones
y me quede dormido con los ojos sobresaltados,
me siguió el espíritu pero esta vez no estaba solo;
andaba de brazos con una languida dama
y me dijo mira a quien encontré aquí.

Como esta vez estaba yo dormido
sin miedo le pregunte,
quién es usted maltrecha dama ?
soy yo tu alma,
es que ya no me conoces o acaso estas soñando ?
me replicó.

Vengo a despedirme
me voy con paz para otro lugar lejos de ti,
entonces esta vez yo repliqué,
no me dejes que te daré todo lo que me pidas,
acaso estas soñando otra vez !
me dijo.

Te he estado pidiendo
algo de paz por mucho tiempo
y cuando la paz pregunta por mi la ignoras,
entonces dije,
pero es un espíritu y es inmaterial
y yo no tengo tiempo para esas cosas
ademáste aseguro que es un alma en vela
que se escapo descuidada por su dueño,
si no mira que hora es.