Poema de poca monta

Mi alma gris invade mi última eternidad,
rasguñando las paredes construidas alrededor de mi poesía,
encontrando los espacios silenciosos de oscuridad,
inundados por la imperfección de mi asimetría.

Las rimas se pierden dentro de lagunas fantásticas,
palabras idas en el viento de mi inspiración impura.
Los poemas de fuego disuelven mis fronteras elásticas,
orillas de dolor disfrazado en alguna locura.

Antes de terminar este poema de tan poca monta
quiero preguntarte: ¿por que reias cuando estaba caido?,
y solo contestas: -Ya deja esa idea idiota, idiota-
pero que importa, si este poema no tiene sentido...

 

Me ha gustado tu poema Rayzel...Un placer haber pasado
Saludos

 

Buena actitud tiene tu escrito. Un gusto leer.
Besos!

 

Gracias a ti, por tener la cortesía de comentar, y dejar un minuto (y quien sabe cuantos segundos) en leer este escrito, que humildemente, me tomare el atrevimiento de llamarlo poema.

Saludos cordiales.

 

Que bien que os haya gustado este escrito, con tintes poéticos (¿?) que nacieron como delirios de este simple literata.

 

Ningún poema es de poca monta para quién lo escribe...
A mí tu poema de poca monta me ha gustado mucho, así que tampoco ha sido de poca monta para quien lo lee..
Un gusto
Saludos

 

Muy agradecido por tu comentario, es muy grato saber que algunos dejan un par de minutos de su vida leyendo mis escritos.

Un saludo sincero.

 

Gabriel, este poema es una belleza, te mando mis estrellas.
PD: y no es surrealista. Un gran cariño.