Elegía al tiempo

ELEGÍA AL TIEMPO

El tiempo se me fue por el espacio
de lámpara votiva
en canasta tejida de misterios
y quiso así la vida
regalarme del tiempo su martirio.

Oh bella soledad
que puso los temores en su horario,
en esa rueca del amor fingido.
Tiempo de lunas tiernas
y naves del hechizo...
martirizome el tiempo y el mar con sus delirios.

Mi juventud... mi numen satisfizo
al ver correr el tiempo.
Después las horas como alto cirio
cayeron en las sombras
y el tiempo se fugó en sus vestigios.

Mis segundos, leones arrogantes
de humedales cubiertos por el miedo
batieron el milenio
y en sus toques de faunos funerarios
blandieron el rosario.

El furgón del adiós se fue rumiando
los momentos del ayer,
pero ahora le doy al tiempo final
las cumbres y el abismo
y el fondo delirante del suplicio.

Ah, tiempo inutil de principio suave,
fulgor del infinito,
eres tal vez el ave rumorosa
que ha de cubrir el tiempo del misterio,
y la voz del olvido
sobre el polvo ardiente del camino.

 

MARAMÍN:

Es cierto, el tiempo a todos nos afecta de distinta manera. Lo que para
unos representa la brevedad de la felicidad para otros es una larga cadena
en el martirio. Agradezco tus sabias palabras y te dedico desde mi terruño
un afectuoso abrazo: J u l i o .