junto a mis tardes solas

Te recordé
y el naranjo destiló suave perfume
La vida se hizo sorda.
Entre tu piel ausente
y los brazos sedientos de tu cuerpo
se estableció el romance de otros tiempos

Esas tardes...
ese abril...
ese aroma de café
perfumando la brisa juguetona
frente al mundo lejano
de gente que se agolpa
Esos ojos pendientes del mañana
con pasos polvorientos del olvido
con preguntas extrañas,
de suyo, sin respuestas.

Aspiré el viento que transporta
minúsculas encimas de tu aliento
Te musité un poema
para que el remolino, entre su cola,
lo lleve hasta tu puerto.

Me quedé suspirando
sentí la conexión clara y absorta
Te presentí en un beso
pensándote muy sola

La vieja calle de La Soledad
se cobijó de sombras al rumbo de la tarde,
con ecos de tus pasos
como en aquellas horas.

¿Por qué nos separamos?
Siempre surgen preguntas
que hasta parecen tontas
los motivos no faltan;
los lamentos, no sobran...

Te recordé esta tarde
de alguna u otra forma...
te sentí viva en mí
junto a mis tardes solas.

 

Bello poema de amor que en la ausencia, recuerda añorando aquel abril, su aroma a cafè, las tarde solas se sienten nostàlgicas.

Un gusto leerte Poeta.

Cordiales saludos

 

Renacer al amor en cada nostalgia. Bellos momentos sin dudas.

Excelente tu poesía estimado poeta.

Saludos.

 

Mariela, qué gusto encontrarte por aquí, Gracias.
Un beso.

 

Añoranza vertida en cada verso. Yo creo que todos tenemos la capacidad de recordar esos vientos de nostalgia cuando se asoman, pero instrumentarlos, hacerlos versos, y luego completar el vaciado en hoja blanca atrayendo de tal manera la atención del lector es no tarea fácil, y tu lo logras a cabalidad amigo poeta.

 

Gracias caro amigo, un abrazo y gracias por comentar.

 

Hola, recuerdos del amor que se ha quedado untado en las paredes del corazón y del alma. Saludos ¡SONRIE!

 

La pregunta contestada, que vive en ti.

Preciosas lineas, un placer conocer tus versos.

Un abrazo.

 

Ángel Virgilio, muchas gracias por tu visita y muy grato leer tu comentario. Saludos

 

huellas para toda la vida. Gracias amiga, un placer leer tu comentario.