Mientras tanto hay poetas malditos.

Con la soberbia del instante cometes disparates,
con la sabiduría del pasado abandonas
empresas por emprender,
todo lo dicta la naturaleza,
nosotros vamos después.​

Y como tú y yo estamos los últimos,
corrámonos una endiablada juerga,
que por algo nos tengan que reprender.​

Los expertos nos enseñan,
entre ellos se pelean,
por ver quién ocupará la mejor cátedra,
(algunos tienen suerte y viven de su saber).​

Mientras tanto hay poetas malditos,
que no creen, ni tienen porqué creer,
pero se aplican tanto para nada,
que la verdad…yo les tengo mucha fe.​

 

Tiene mucho sentido tu poesía Alfredo. Saludos cordiales y estrellas para ti.

 

Hola, pues que interesante, ¿cómo se comporta un poeta maldito?, bendiciones. Saludos
¡SONRIE!