Despedida número veinte (no apto para cursis)

DEPEDIDA NÚMERO VEINTE
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Que te encontraste a un mengano?
pues fóllalo, calienta tus pies con los suyos
duerme con él, aprisiónalo
sueña sus ojos, enamóralo.

Antes yo hubiera sudado glaciares,
y las zarzas del desengaño
hubieran anidado atrás de mi barba hirsuta.

El cielo no hubiera escampado,
mientras mis ojos de cuarzo
en los escollos del suelo hubieran buscado consuelo.

Pero ahora no.
Tu sonrisa de arsénico discurre
en mi caudal sin hacer laguna.
Miro la función tan conocida
mientras vislumbro horizontes
y de mi oído limpio la cerilla.

Ahí sigues?
Ah sí, haz lo que quieras,

que hace dos horas dejé de amarte.

Carlos H. Armas
​

 

me gusta mucho su estilo mi amigo, me recuerda al enorme Rockdrigo, un abrazo.

 

Y auqnue fuera la cien... me gusta esa convicciòn.. auqnue por dentro el corazón estè pasando el trago màs amargo.. lo importante es no demostrar debilidad.. sino la seguridad de hacer ver que esa persona se lo pierde... BUen elección pasar por tus versos.. seguirè hacièndolo.
estrellitas armoniosas.

 

Hombre, me halagas con esa comparación. Muchas gracias y un abrazo.

 

Muchas gracias por tu comentario y tu visita Armonía. Ya ves que si me acordaba de ti, con tus ojotes y tu gorrito. Abrazos!

 

palabras nada cursis y un toque de odio que es de mi agrado...hace dos horas deje de amarte suficiente para dejar todo...un saludo ¡

 

Gracias por tu visita Rayenari. Algo así es el trago amargo de algunas despedidas. Saludos!