A María Callas

Cae tu voz, María, como un rayo quebrado,
cubierto de matices que no verán su brillo
pero alzarán su tono, húmedo, sofocado,
como quien introduce en su pecho un cuchillo.

Cantando serás tú, otra que no ha cantado;
la encerrada en sus cuerdas rotas, bajo el castillo
triste, lleno de piezas; arias que no han llorado
el canto aquel, arisco, absorto, vil, sencillo…

Divina, cómo arde, cómo arde tu voz
sobre los escenarios que se explotan al verte
Y tragan con tu nombre el sonido feroz.

María, Casta Diva, a ti el eco fuerte
del trueno que no llora, ululando veloz.
Sea en ti, oh Divina, más vida y menos muerte.



Jeison Villalba

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Hola Jeison.
Siempre salgo complacido al pasar a ler tus versos.
Felicidades. Miguel

 

Un buen soneto alejandrino en su forma pura al no haber sinalefa alguna en sus cesuras. Tiene mi Apto.

 

Muchas gracias, estimado Maramín... La voz de María Callas nunca dejará de sonar, pueda que ella y hasta nosotros la olvidemos, pero su voz, su voz es para siempre. ¡Un fuerte abrazo!
Jeison.

 

Me alegra mucho el hecho de que, aún en mi falta de práctica y técnica, logren mis versos llegar hasta distinguidos poetas como usted, estimado Miguel. Un fuerte abrazo de mi parte.
Jeison.

 

Líneas que lamentan una muerte y celebran una vida.

Inmortal musa se acuna en tus versares Jeison.
Tus letras siempre prestas para sacudir los recuerdos, plazuelas y callejas. Mi mente vuela a los escenarios.

Gracias por compartir tu versar.

Un abrazo fraterno.

 

Estimado Jeison,
me encanta este soneto a la Callas,
pero encuentro un par de hemistiquios que requieren revisión;
por ahora NO APTO;
un saludo cordial,
edelabarra

 

Muchísimas gracias, estimado Alberto. Aunque, le confieso, no puedo evitar sentir cierto resentimiento por este arte poético. Agradezco su visita. Un fuerte abrazo.

Jeison.

 

Veles: Muchas gracias por acercarte. Creo que ya está corregido ese detalle que menciones, aunque a mí me haya sonado bien, debo aceptar los parámetros exigidos en el foro. Un fuerte abrazo!

Estimado César: La primera vez que escuché a la Callas, me fue totalmente indiferente, quizá porque en ese momento no fui capaz de adentrarme en la auténtica significancia de lo que ella cataba. Con el tiempo, y en otra otra ocasión, logré descubrir qué era lo que había detrás de la voz; esas notas que parecían caer rotas y tumbarme... Desde entonces, no dejo de escucharla. ¡Muchas gracias por su visita!

Jeison.

 

siempre es un placer leerte.
Escuche y eso me rebasó, se rinde. Es belleza.