Cosas que escribe la lluvia

Cosas que escribe la lluvia

-Monólogo a mi sombra-


Miércoles

Querida amante que vive en lugares espontáneos y desérticos de mi alma opaca; te hablo a ti porque nadie más tiene sus oídos en la misma frecuencia, te confieso, quizás, porque no tengo opciones y a ti te queda únicamente escuchar el eco aguerrido del lado correcto de mis entrañas. Siento de repente que todo cambia, las cosas tienen piernas y tienen mundo, mis banderas ya no ondean de la misma forma, y me empiezan a importar los parásitos, a veces me dan ternura, me apaciguan, me sostienen, a pesar de que su realidad sea un efluvio de tristeza. Tengo mis temporadas críticas encerradas en el fondo de la conciencia desde que tengo memoria, pero ahora brotan como la humedad en la pared, como el vapor...¿Y qué hago con ellas, dime? Tú, nacida de los malestares más ingenuos, tú que todo lo sabes, que has recorrido los laberintos más profundos de mi ser y has salido viva, ayúdame a despedazar este sadismo intelectual que está quemando remanentes vitales en todas mis costas. Hasta hoy he mantenido la paz como un pulpo, maniobrando mis tentáculos, dispersando el trabajo con los años. Pero todo ha cambiado, las circunstancias son un vacío, y las hojas, un vacío, y hasta el dolor se reduce a la nada. A veces pienso que es válida la espera, válido el respeto a quienes puedan extrañarme. Y luego, desprender la tinta en un mar hostil que sólo supo envenenarme de angustias. Dime, entidad amada por mí en los minutos negros, en las horas torcidas, dime, cuánto tiempo más esta cobardía prendida a la piel, anidando en los poros. En qué soledad terminaré de sufrir pavores de saberme, de añorarme. Es que las tempestades son augurio y mis pies sufren de tentación, de impulso, de firma, del emblema terminal de esta poesía que desahucia.

Jueves

¿Será, seremos? El cielo se sigue desprendiendo, y los sentimientos se desprenden también de mis pulmones, del lugar donde estaban los suspiros y que hoy es un punto inexacto y baldío. Y de mi enjambre cerebral se subliman los supuestos. Ya no quiero seguir pensando, me rehúso. No quiero hipotéticas soledades, absurdos encuentros figurados. No quiero saber nada de la espera ni de los retornos agudos que esqueletizan mi materia gris. ¿Por qué la vida, amante, por qué sus cruces y sus sorpresivos malestares, y luego las cimas y los aterrizajes? Quizás todo sea más, o quizás todo termine como siempre: odiar ser este pedazo de muerte en pleno proceso de emergencia, y no saber si el suelo será suficiente para el hastío de mis pies.

Viernes

Llueve. Quizás es la respuesta del universo a mi metamorfosis lupina, al intento de desenvolver mis instintos sobre una sábana blanca, y sacar cosas de adentro, clasificarlas, desconocer. Tengo miedo, o miedos, temo aquello que llaman locura, temo sus proporciones desconocidas y las dimensiones a las que te lleva. Tengo miedo, pues yo, como cualquier otro, soy una víctima potencial de sus garras heladas. Es posible que un día comparta mi recipiente con algunas voces difusas, que viva para las conversaciones abstractas con algún ser en mi abismo. Y tú que ya existes, amada, inventada por mí, no respondes, eres voz pero te ocultas y me respondes con imágenes que duelen, que escuecen la piel y el recuerdo. Abandonas imágenes a voluntad y luego te vas. Y la lluvia me habla de tu rostro, de tus raciones melómanas, de la constitución disgregada de tus huesos. Y somos algo, dialéctica interna, sociedad secreta con una mímica y un canto que nos pertenece. Somos esto. Nos fumamos el frío en compañía de algún absurdo estupor celestial, abandonando cualquier credo prudente a la ausencia. Dime por qué estás aquí, qué masoquismo te convoca o envía a alguien a rescatar mi cordura.

Sigue lloviendo, saca la lengua de tu guarida y aliméntate de esta nostalgia.

Lunes

Se moja el cuerpo, se sumerge la piel en un charco, y parece que la vida regresa, que las gotas que caen desde la nariz son una parte de la mente, un pensamiento que se aúna al resto del agua, y después se volatiliza, vuelve a las nubes, llueve sobre los demás y sirve para algo. Parece que los días mojados me arrancan primitivos anhelos del estómago, y ando con una pena delgada que cuelga de mi ombligo a mis pies, y que busca la soledad entre las baldosas, en los transeúntes, en las cunetas. Y como no encuentra nada, vuelve a mi caverna-cuerpo, donde el tiempo es más cálido aunque el sufrimiento sea perpetuo. Yo llego a casa, la ropa seca se asemeja al abrazo de mi madre o de mi padre, y me da por invocar pasados, por ser nuevamente una hoja en posición fetal, por descubrirme niña o cadáver, y me entrego al olvido, me dibujo de noche, me duermo en la fantasía de ser un pez que muerde sus escamas.
Siempre me protege el sueño, donde se inunda el planeta y todos somos sirenas.
.
.
.

 

primero que nada... el finde te fuiste de joda, y no hubo tristeza, ni lluvia, ni loba, buenooo, si loba si jaja....
creo que la prosa es mas lo tuyo, en los poemas, ultimamente te expandes demasiado, y ya te estaba por sugerir, haber si te echas una prosita violetita... pero bueno, te me anticipaste jeje...
el viernes, fue el día que mas disfrutaron mis ojos, razones varias gotas de lluvia, que empañaron la ventanita que dejo abierta para que se airee mi corazon de sirena jaaj... siii porque tmb soy sirena, y ya lo dijo tambien tu linea final
luego busca la canción, humo sobre el mar, de lisandro ... es lo que escuche mientras te leía, y caía justo jeje...
te dejo un beso gigante, luego leo los poemitas q me faltan, q creo me anda faltando alguno jo
muacks!

 

Claroooo!! El finde salí a bailar Shakira, waka waka y la canción de la loba jajajaja. Dejate de joder, cuándo me viste a mí con tanta joda??? Fue un finde triste, con lluvia, melanco, de esos lindos Y bueh, escribí estas pavadas que me resultaron algo coherentes, así que las publiqué, y son tan largas que sos el único que las leyó jejeje.
Le queda perfecta la canción de lisandro, voy a ver si más tarde la subo para acompañar el poem. Por otro lado, no sé si se me da mucho la prosa, me cuesta bastante, pero bueno, habrá que intentarle jeje.
Gracias por estar siempre lindis...aunque a este te traje de masoca jajaja.
Te quiero, besos muchos