Desolado

¡Cuántas olas han barrido mi playa!,
Tempestuosas y asoladoras.
Cuantos vientos las arenas antaño doradas
Arrastraron al mar de mis horas.

Horas de vida en suspenso ,
Horas de oscuridad y tinieblas,
Horas que si ahora lo pienso...
¡Ay corazón! ¿Por qué tiemblas?

Si el destino de los hombres en los astros está escrito,
Si el camino de mis pasos fue en la eternidad propuesto,
De ese futuro impuesto, que me ha sido prescrito
Desde el fondo de mi alma de este mi sino protesto.

Mi playa está desolada, mas rendirme ni lo pienso
Lucharé por mi mañana ya que mi hoy está muerto.
Levantaré hoy mi espada, guiaré mi nave a puerto,
Y en buscar una esperanza gastaré mi último aliento.

 

... cómo cualquier mar... no me quedaré quieto... Melancólico y esperanzador... Precioso poema Jucatohi. Un placer leerle. Muchas gracias

Saludos

 

Amiga Rosaela, muy agradecido por su amable comentario. En medio de los avatares de la vida no cabe la resignación, tenemos que ser rebeldes y luchar, aunque parezca que no podemos ganar.
Encantado de que haya sido de su agrado.
Un cordial saludo.

 

Así se hace amigo, jamás nos rendiremos y lo mejor...
dirigir la nave a puerto, pero eso si, cuando llegue la hora del descanso,
entre tanto, en movimiento, buscando el último aliento, buen poema.
Bueno, veo que se merece una repu y la rodeare de estrellas para dar
luz a esa esperanza, también te dejo unos besos para que no decaigas.
Con cariño, Lola

 

Estimada Lola, tu comentario me alegra el día. Siempre hay que luchar y buscar motivos para la esperanza.
Me siento honrado con tus estrellas y la reputación.
Me siento halagado por tus amables palabras.
Me siento animado por los besos que recibo encantado.
Un muy cordial saludo.

 

Unnnn en este caso creo que la halagada soy yo,
gracias amigo biene bien de vez en cuando sentir halagos.
Desde el mediterráneo te dejo mi cariño.
Lola

 

Lola, no vienen mal de vez en cuando unas palabras amables, no.
Tu cariño mediterraneo es recibido por quien nació y creció en la confluencia de mar y océano, junto a las columnas de Hercules.
Un afectuoso saludo.