A mis hijos

Como racimos de este árbol
Genealógico que ahora soy
Me eternizan la vida estos frutos
Que voy dando en estas mis ramas
Que penden y dependen de mí
Sólo por un tiempo hasta que decidan
Soltarse y caer y germinar por si mismos
Y florecer con esas sus ramas
Y de esos sus frutos
Que también serán míos
Quiera la vida y los lleve a caer
En tierra fértil
Al menos he procurado abonarla
Para qué así sea.

 

Parece una bella oración, un poema dedicado a tus hijos, cuanto amor reflejas en tus letras. Te felicito.
saludos fraternos
Esperanzapaz

 

Como el amor de los padres no hay ninguno.
Saludos.

 

Gracias Esperanza, un tema a proposito del Día del Niño que celebramos el 30 en México; y sí mis hijos son mi vida.
Un Abrazo y gracias por tus comentarios

 

Cuanta Razón tienes Daniflusflus; Saludos fraternos y gracias

 

Bellisimo amigo, bonita forma de expresarlo, te quedo divino el final. Ese es el deseo de todos los que como padres, alisamos el camino y lo preparamos para que ellos tengan un buen futuro.
Felicitaciones por estos versos. Un abrazo.

 

Gracias Marisa!!! un placer recibir tantas flores por un sentimiento escrito! Abrazos desde Mexico.