Hablemos de amor.

Hablemos de amor.
No digo ese neandertal sentimiento
de frente huidiza en unos cuantos días
porque lo efímero es otro canto,
viene con finales de músicas patéticas
que ya se sabían de antemano
que dura lo que una descarga de inodoro.
Hablemos de esas cosas
que cuando se está ausente
no están ausente de uno mismo
porque se lleva como el polvo a la ropa,
pero es tan humana esa espera que espera
y es un modo de presencia viva y latiente
que está y no está,
cual si fuese un misterio mensurable de muchos modos
sobretodo sin los ojos
sobre todo en algún lugar de uno mismo
donde uno sabe que es el territorio por llegar
donde uno sabe de antemano que todo va a estar bien
donde la sonrisa tiene el valor de la sonrisa
y el abrazo tiene la certeza del primer abrazo.
Hablemos de la espera y el retorno
a todas las cosas,
porque se anda de objeto en objeto
de objetivo en objetivo
de camino en camino
de hombre en hombre
y cada episodio espera su sombra consecuente
como a su propia sangre,
porque se trata de vida misma
ni más ni menos que eso con sus opacas luminosidades
y acaso es por eso que se guardan en la memoria.
Yo estoy hecho de ellos,
y cuando digo hablemos
también hablo de las miradas para ver,
de las manos, de lo prometido y comprometido
los que esperan y no desesperan,
del simple beso que es más que eso
porque uno anda de viaje siendo moldeado
que es algo de piedra, árbol y paisaje,
edificios, vecinos y gente,
de noches y estrellas y más allá
todo lo que está dentro de la cabeza
que es lo que contiene esta carne que anda,
que ronda que va pero vuelve
a las cosas y las gentes sin cobrar tiempos ni distancias
de los cuales muchos me esperan desde hace años
con ese lenguaje que nos es propio y cómplice
en estado de espera como espejos latientes
y están allí en la memoria para volver.
Y al paso del tiempo
me voy adentrando en todas esas cosas,
voy siendo esas cosas
esas voces, esos coros de pájaros
ese tumulto de historia en la que me voy convirtiendo
dejando mi ropa en esas cortezas
en esas ramas
en esas flores
en esas tormentas
que van poblando mi esqueleto
con dolor y con ternura
en este territorio en que voy mudando
a paso de viento en el mundo
cuando me dices, por ejemplo,
hablemos de amor.

XXXXXXXXXXXXXXXXXX
sergio cassarino
DERECHOS RESERVADOS

http://poesiapistolaenmano.blogspot.com/

 

Hola me alegro cuando reconoces lo que debes reconocer, mil gracias... toda una sorpresa para mi encontrar tus líneas, el tema del amor saca ganas de amar. Saludos y estrellas
¡SONRIE

 

Vale! Pues hablemos de amor...seriamente, y no se sucedáneos...Más tranquilo??? jijijiiiji. Un abrazo, amigo...El mundo es un pañuelo... y no precisamente para llorar en él...Me alegra encontrarte por esos mundos de Dios...y siempre a tu altura... Paradójicamente, te reconozco antes por lo que escribes y cómo lo escribes, que por la foto de los domingos.

 

Vuelvo a dejar constancia de mi lectura :::sorpresa1::: en versos que ya he leído anteriormente, porque cuando algo me gusta... vuelvo...
Muy bellos versos amigo Sergio, es uno de los poemas tuyos que más me ha gustado :::banana:::
Un gran abrazo argentino que cruza el charco

 

Hola mujerbonita... gracias por tu lectura, en cuanto a lo que dices...mmm... si te contesto... sería larguísimoooo....jajajaja... de modo que gracias de nuevo y besotes. Sergio Cassarino.

 

Arriba de la foto que muestra un animal con un sólo cuerno, tal vez porque el otro ya lo haya abandonado también...jajaja... reza...poeta recién llegado...mmm...recién llegado????? jijijiji...vamos! Es que yo ando por esos mundos de Dios y yo sólo te vi en un mundo y cada vez mas pobretón...tanto que da pena. Y ya sabes... la letra con sangre entra...jajajaja... chau Goyo y muestra tu genio por aquí. Sergio.

 

Para qué mostrar mi genio (caso de tenerlo, que lo dudo), si ya tenemos el tuyo, hombre! Me alegra encontrarte también en este pañuelo...En realidad es uno solo, pero está como doblado...nos vemos en el anverso y también por el reverso... Un abrazo, amigo...Algo me trajo por aquí...Ya sabes que el canto de sirena es irresistible...Pero me vine con el traje ignífugo...tranqui...podré sobrevivir....Además, estoy echando en falta algún debate interesante y me estoy anquilosando...O será la edad??? No, mejor no me respondas...que eres un peligro!

 

Pero Goyo...que no te compro por malo!!! jajaja... muestra lo tuyo hombre... y lamento saber que tienes un solo pañuelo... pues yo tengo varios y los uso a todos...jajajaja... en ellos no te veo...en cuanto al canto de sirenas... cambia de proveedor Goyo, que eso te pega mal...jajajaja...y en cuanto al traje ignífugo, pues, has cambiado de abogado a bombero...mmmm...en cuanto al resto...piensa Goyo...es una buena dicotomía anquilosamiento/edad...jajaja...van como el jamón y el vino...jajaja... sigo??? saludossssss

 

mmm... qué te debo Fabi??? jajaja...besotes. Sergio Cassarino.

 

Buen trabajo <Sergio, siempre fiel a tu estilo y con esa facilidad de enhebrar versos.

 

Ni se te ocurra seguir!! Yo sabía que eras un peligro y que como te diera hilo ibas a tirar de él....Te gusta tanto un ovillo, como el jamón y el vino... Bueno, me alegra ver por aquí a una cara conocida...ijijiijijiji... Un abrazo, amigo. Eres uno de los grandes...

 

Hola Terrin, gracias por tu lectura y ya ves... uno despunta el vicio como puede...jajaja... saludos afectuosos siempre. Sergio Cassarino.

 

mmm... Goyo... no tan grande...mas bien petizón... 1.67 mts... apenas para jugar pelota vasca...jajajaja... saludos estelares...mmmm Sergio.

 

Hablar así hace que valga la pena el insomnio del día. La memoria de sonidos me condujo a la asociación
de Patrick Doyle y fue un viaje a las cuerdas flojas donde se juega la vida.

Me gustó hasta la médula misma... qué podés hacer si sos poeta.

Me guardo tu poema en mi espacio de favoritos, es brillante.

 

Hola Anna, gracias por tu lectura y eso que me dices me parece excesivo para un texto que sólo tiene la pretensión de hacer pensar un poco y ya... tu no sé, pero yo sé positivamente que no soy poeta... apenas alguien que escribe y nada más. Recibe un saludo cálido y afectuoso. Sergio Cassarino.

 

Bueno, para no pecar de excesos me limitaré a seguirte leyendo en silencio... Abrazos.

 

Hola Sergio:

Como siempre, paso a leer tu ingenio y jocosidad
plasmados en una extensa -pero agradable- prosa poéica...
Un gusto navegar por el mar de tus letras.

Saludos cordiales.


El Armador de Sonetos

 

Sercas
Hablemos de amor
de aquello que se vive, que se respira en las cosas cotidianas
que crece en los árboles
que se ramifica en los manantiales
que nos incita a caminar
y si estamos varados nos permite divisar en el horizonte
nuevas alternativas
hablemos de amor
de ese que perdura y se saborea en los actos de cada día...
Encantada de leerte en esta entrega hermosa
Mis estrellas y un abrazo
Ana

 

mmm...Anna, si leerme te aporta algo...me doy por bien pagado. Saluditos, besitos muchitos...jajaja... Sergio.