Aprendiendo a amar

Sé que no debo cruzar esa línea
estoy entre la sensatez de tu corazón
y lo paranoico de mi soledad,
no sé si me estoy acercando a ti
o no hago nada por alejarme de aquí
no sé si busco tu consuelo
o el castigo de mi libertad,
a dónde voy
si a veces me atas con mucho dolor
a lo iracundo de tu amor
y a veces me das libertad para amar
a otra mujer,
me prefieres vagabundo a estar preso de ti
prefieres esperarme como a un perro herido
y curarme las heridas,
y en tu consuelo encuentro sabiduría
porque tal vez sabes
que amar es amar con libertad
y que con libertad
uno sabe quién lo ama de verdad.


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Hermoso, precioso, un poema magnífico y soberbio.

 

Creo que te parece controvertido, te desorienta un poco la forma de ser
de la persona aludida. Vamos a pensar en una razón y en la mejor.
Cuando se ama se deja ser, "la libertad de uno comienza cuando
empieza la del otro", siempre se sabe que si el amor es verdadero,
aunque una persona esté a kilómetros de distancia no habrá engaño
y esa distancia hará que al encontrarse se comprendan y amen muchísimo más.
Muy buena temática para orientar un poco a quienes crean que el amor crece
entre rejas, no es verdad. A ti también, ella lo está haciendo bien.
Muchísimas gracias por compartir, Valentino. Saludos.
​

 

Gracias por tu elogioso comentario.

Saludos

 

Como en la mayoria de los asuntos de la vida, hay un poco de arte y de ciencia en lo que hacemos,y creo que en el tema del amor no sé cuanto pese el uno sobre el otro;tal vez como dicta la prudencia,el equilibrio suele ser lo más sensato.

Saludos