Amor y Libertad

Es el uno tan raudo como el viento
y, como el ave que el azul navega
y el agua que el prolijo bosque riega,
pulcro y gallardo, vívido y atento.

Es el otro, al cruzar con bríos ciento
el nudo yermo y la elegante vega,
un resplandor que el ojo hiere y ciega,
un torrente que deja sin aliento.

Llaman los hombres en el ancho mundo
Amor a aquel y Libertad a aqueste
con grande júbilo y placer profundo:

saben que sin su albar y tersa veste
es de la vida cada humil segundo
un pozo oscuro y un dolor agreste.​

 

Me ha encantado el cambio de ritmo, un regalo tu soneto amigo; un abrazo

 

me ha encantado este soneto por dos motivos, estimado Littera,
el primero por su excelente factura ( resalto la calidad especial de los tercetos)
y el contenido en defensa de la libertad y el amor,
un saludo cordial,
Eduardo