Confusión o realidad 1

Amarte después de mi muerte
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Confusión o realidad 1


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Muchas veces mal interpretamos las palabras, ya sea por dolor, culpa y odio; pero lo que no se puede negar es que en el fondo solo fue un engaño de nuestros pensamientos, nuestra mente nos ha vuelto a engañar.​

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Culpe a Cupido por mi error,​

para huir de toda culpa,​

quise olvidar hasta mi nombre,​

no haberte jurado mi amor.​

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Decías que hacer el amor no era lo mismo,​

te quejabas no sentías pasión,​

me ignorabas y humillabas,​

un día me canse; me fui de allí.​

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Como cobarde arregle mis maletas,​

me esperaba un gran viaje,​

en el camino arranque mi corazón del pecho​

y decidí entregarlo a un niño muerto.​

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El camino recorrido cada vez era más largo,​

los días se hicieron meses y ellos años,​

cuando regrese a mi vieja casa de verano,​

al mirarme en el espejo se veía el peso de los años.​

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En mi cara se veían unas arrugas,​

mi cabello se caía y mostraba unos destellos blancos,​

mi sonrisa no revelaba nada,​

tenía tristeza en mi mirada.​

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Desperté de ese sueño en plena madrugada,​

tú estabas junto a mí con tu cuerpo desnudo,​

cubriendo graciosamente las partes de mí​

que aquella vieja cobija no tapaba.​

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Al verme despierto me mostraste una linda mirada,​

de esas que te roba el corazón y te dejan si habla,​

sin cruzar ni una sola palabra me besaste,​

te montaste en mi pecho y comenzamos a devorarnos.​

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Tu piel se sentía tan cálida,​

con tu olor saciaste mis ansias,​

en ese momento estaba en otro planeta,​

dormí a tu lado olvidando esa pesadilla.​

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Cada día te veía diferente,​

solo te observaba desde la cama,​

no me hablabas ni me tocabas,​

tu mirada reflejaba odio.​

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Inventabas cada escusa mediocre para no estar juntos,​

antier te dolía la muela hoy es la cabeza he pensado​

que tal vez mañana te duela la espalda,​

me encanta como huyes de mis brazos y te refugias en la almohada.



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Una mañana me desperté recordando mi sueño,
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era tan similar a tus gestos de desagrado hacia mí,​

ese día habías salido temprano,​

hacer no se tal cosa en un sitio lejano.​

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Me invadía la locura y los malditos celos que no me dejaban en paz,​

te imagine desnuda encima de otro cuerpo,​

haciendo el amor en otro lecho,​

locura que se volvió droga y me mataba aunque yo no lo supiera.​

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Me desperté en la entrada de un bar,​

mi reloj marcaba las 6:53 pm,​

por primera vez había pasado una noche​

larga fuera de casa.​

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Como pude me levanté del suelo,​

acomode mi ropa y miraba si no me faltaba nada,​

mi caminata fue lenta, trataba de arreglar mis pensamientos,​

no recordaba nada de esa noche.

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Edilexys Ramírez​

 

La historia continua? extraño poema de amor, y en un estilo muy diferente al tuyo kao, me ha sorprendido gratamente.

 

si bella tiene una segunda y ultima parte