Nadie sabe quién es

El hombre busca la sociedad,
mientras esta lo persigue,
aún sin saber quién es.

Caes y te levantas,
gracias y por el colectivo,
eres tan solo el experimento de vida.

Todos buscan la actitud,
sin saber quién es el hombre,
hasta que cae en un error.

Decepción popular,
por el ahora conocido hombre,
¡Ha errado!, pobre hombre.

Nadie olvida al pobre errante,
pero sólo saben de él su error,
¡Pobre hombre!, está acongojado.

 

Me despertó su poema un extraño interés que tengo de pensar sobre estos temas del hombre, la sociedad, la religión, etc.

Yo pienso que a pesar de que el hombre se pueda sentir perseguido por la sociedad, ésta, al final es una manifestación humana, con todos los monstruos que esa especie de zoologico contiene. Le impone para convivir las consideraciones colectivas que los otros hombres dictan para la vida y de ésto deviene su aprobación o el rechazo en ella.

No tienes idea qué difícil (hasta heroico) es disentir del imaginario colectivo que establece normas a veces absurdas. Pensar diferente al dogma o lo dictado se revierte en muerte social y hasta física para el osado. Si sobrevive carga el estigma él y su descendencia.

Saludos doña kattia,

 

Una óptica amplia
resumida en tu grata composición.


Gratos trazos en conquistadas imágenes poéticas. Mis sinceras felicitaciones.