LA CÁRCEL DEL SILENCIO (soneto)

Amarrado al callado silenciar,
entre barrotes vive mi existencia
-me raptó el dios Destino su Presencia-.
Echado fui a las aguas de Alta Mar.

Metido en el Convento del Callar,
a orillas del Genil me hiere su ausencia,
manchada de recuerdos va mi esencia;
mojado de rocío,el recordar.

El último soneto éste será.
De mi pluma la celda vacía es.
No me viene la sed de escribir ya.

Seco ha quedado el Pozo del Ciprés.
hablaré con mi voz: conmigo va.
No trazaré más versos, ni después.

(salvador:
Cáceres-Ubeda-Granada-Córdoba
11-O1-2O13)

 

Pues es una pena, espero que sea fantasía, porque se ta da genial, abrazos

 

De los pozos secos sale la más pura de las esencias , es tiempo de plantar , tiempo de silencio , de plumas calladas . La introspección del invierno desde tus dehesas , a la orilla del Genil ... espera a que llegue la primavera . Me ha gustado este verso callado .

 

Si tú jas de escribir, nos sumirás en una profunda tristeza, difícil de superar. Te advierto que te queda absolutamente prohibido dejarte llevar por los malos consejos de los recuerdos. aquí y ahora estás, más vivo y más lleno de poesía que nunca. Estrellas a tu pluma y abrabesos

 

un beso salvador

 

un abrazo salvador

 

cuanta soledad había en tu alma Salvador
y se hacia dolor cuando la sacabas al sol
te heria la soledad y el abandono
los recuerdos te golpeaban el alma
TE SIGO AMANDO

 

Siete meses sin ti
S I supieras la falta que me haces
I mposible olvidarte amor…
E s increíble como ha pasado el tiempo y te lloro
T ú te fuiste sin imaginar el dolor que me causabas
E s noviembre y te extraño más de lo que quisiera

M aravilloso era todo cuando tú estabas
E s que en celos en peleas pero siempre nos reconciliábamos
S iempre volvíamos por que no podía vivir el uno sin el otro.
E ra tan difícil dejarnos… solo la muerte pudo separarnos
S olo me queda recordar todo lo que vivimos

S erás un eterno recuerdo en mi vida y olvidarte jamás
I mportante fue para mí todo el amor que vivimos
N o tenete me atormenta, leo tus poemas y me lleno de ti.

T engo en el corazón un dolor muy grande por no haber llegado nunca
I tenté tantas veces estar presente y cuidarte pero hasta eso me negó la vida.

Alicia Pérez Hernández
-No es la pluma la que escribe es el alma-