Oda de la noche

Abro la entraña
de esta noche otoñada
sumergiendo un latido
en su entrañable velo de sosiego,
los árboles cantan con el viento
y las nubes se tiñen de violeta
tras la luna despierta
y su luz magnética.
Ya los grillos están recogidos
de frío y no silvan
sus canciones criqueantes.
Despojo a la hora del minuto
y el segundo me vuelvo calma,
paz sin tiempo
me vuelvo sombra de esta noche,
vuelo al alfeizar de tu ventana
para morder tu dulce cuello,
y tener de tu boca mi agua de rosa,
noche lúgubre y umbría a ti te escribo
con la sombra
de esta alma que te habla,
a la hora que gatos y lechuzas cazan,
y murciélagos si no fuera
por este frío de otoño
volarían tras el mosquito y la polilla.
Los dondiegos de noche en flor
abren sus trompetillas coloradas
a la noche y las cierran a los rayos de sol,
las estrellas parecen lejanas y cercanas
como pequeñas pepitas de oro reluciendo
a veces me pregunto quién las puso ahí
o si solamente son luciérnagas,
en esta noche que todo lo envuelve de caverna,
el viento hace el amor con las persianas
y más te pienso en la oscuridad
alumbrando el recuerdo eterno,
las luces de la ciudad
están encendidas en soledad
a veces me gustaría romperlas
y dejar a la noche brillar
en su esplendor de oscuridad,
tantas luces encendidas en el planeta
quemando árboles,
cuando la energía de este amor tuyo y mío
iluminaría media ciudad.
Soledad tus alas me acarician
y me llamas hijo de la luna de plata,
me susurras como sientes
a través de lo muerto de esta tierra
de sangre, fuego, y agua.
Oígo como me llamas
para meterte en mi cuerpo
y sacar todos mis alientos,
pasado de un pasado que nos hacía brillar
y mirarnos en la boca de la estrella
en miel dorada con sus ojos en tu tierna cara,
parpadean los sonidos y se escuchan las luces,
te amo sin precauciones
hasta enredarme con tu esencia
y dormir a la noche en nuestros sueños de lobos.
Quién fuera agua para besar tu cuerpo
cuando te bañas por la mañana,
quién fuera viento para mecer tus cabellos,
quién fuera sol para crear oro en tu piel.
Quién fuera tu mascota para lamerte.
Y tu comida para que me comas.
Despierto este sentimiento latiendo
por ti sonriendo dentro escribiendo
que a tu lado nunca caeré muerto,
vida eterna, amor completo,
amor eterno tú mi ángel de la noche
yo tu guerrero antiguo.
Tu enamorado por siempre.
Noche lÚgubre y umbrÍa​

A ti noche oscura te escribo.
¿Por qué no me das el sueño que tanto ansío?
Paso noches enteras de insomnio escribiendo poemas hasta
enloquecer, llevo ya cinco días sin dormir y veo que se van
mermando mis facultades mentales y escribo frases sin sentido,
garabatos en hojas de papel.
Me asomo a la ventana y contemplo las sombras de la noche como fantasmas,
deambulando sin rumbo.
Mientras apuro la botella esperando matar esos fantasmas de
mi cabeza que suenan como delirios con sus voces.
Me estoy volviendo loco.
Solo veo sombras y figuras que se dibujan en tu oscuridad como
demonios.
Sólo los gatos y lechuzas salen a cazar como los murciélagos.
A ti noche lúgubre y oscura te escribo que bajo tu protección de tu oscuridad
ven salir los ladrones y asesinos a hacer sus acometidos
de muerte y delito de acero y sangre.
A ti noche lúgubre y oscura te escribo.
Tú que no entiendes de genocidios ni de muerte ni de fosas
comunes selladas con cal y tierra ni de fusilamientos.
Tú solo ciegas la luz del sol y solo el fuego y los fusiles iluminan
tu oscuridad.



EL CASTELLANO​

El Castellano y Leannán-Sídhe

 

La noche mientras más fría e infinita, la encuentro más agradable, magníficas imágenes has compartido.

Besos.

 

Es un poema desgarrador que expones a la luz del sol como para dejar en evidencia todo este dolor que dices está enloqueciéndote. Siento que este sentimiento tuyo es de los grandes y no puedo hablar desde mi propia experiencia porque nunca he sentido un así como tú sientes hasta el extremo de sentir que el pensamiento se nubla. Me gustaría sentir así y enloquecer un poco de puro amor y así comprender a la persona que lo está sufriendo. Yo solo te digo que has tocado fondo y más abajo no puedes ir. Ahora depende de ti, independiente de las razones de por qué haya terminado ese gran amor, o te quedas ahí o te levantas, es solo tuya la decisión, amigo, creo que es mejor levantarse y a enfrentar la vida en forma convalesciente aún pero es para eso que vivimos y la vida nos prueba. Tirado en ese hoyo profundo nadie te ve, ni ella. Podría ser que si te levantas y luchas por lo que más quieres, alguna respuesta podría haber, mejor dicho, la habrá. Si no es ella, la vida misma te irá mostrando nuevas oportunidades y experiencias que a lo mejor ni soñaste pero es misterio vivir y a ese misterio hay que aferrarse. Todo está bien hecho, por algo pasan las cosas y yo sé que algún recordarás esto sin dolor pero no olvidarás porque habrá en ti una nueva vida y un hombre mucho más entero para enfrentar las siguientes batallas, son muchas en esta vida y casi siempre salimos ilesos y más llenos por dentro, más fuertes de alma. Tu poema es grande pero creo que empieza todo a pasar porque todo lo dejaste aquí. Un abrazo, amigo. Te estimo, Miguel Esteban.
​

 

te regalo una foto de mi hijo helecho se llama Alegría, te mando un besito gracias por todo.

 

hola te dejo mi trebol de cuatro hojas que me da suerte igual que conocerte

 

Es hermoso el Helecho. Muchas gracias Miguel Esteban, me fascinan las plantas, amigo. Las siento tan vivas como yo y más porque cuando estoy triste me transmiten sus ganas de vivir. Muchas gracias, de verdad. Es bellísimo. Un abrazo.
​

 

Gracias a ti amiga

 

Un bonito poema nos dejas en tus versares amigo Miguel Esteban
donde la sutileza poética acompaña a tu pluma para poder
disfrutar de la lectura de tus letras.
Besos y un abrazo. Tere

 

gracias amiga por tu visita que alegra