Sin otra vida

No hay otra vida.

No sé si pueda concentrarme en hacer lo que me pides.
Entre gestos te convences y aseguras distanciamiento.
Y te alegras desterrándome de tus recuerdos,
de impedir que aparezcas en mis sueños
de un golpe contuso que te borre de mi mente
que no sabes que yo vivo enlazando sentimientos.

No podrás impedir perpetrarte en mis sueños… ni soñarte.
Pídeme que te olvide para no cumplir con tu deseo
olvida que existo…para existir con mis besos
sepulta mi recuerdo… sin sepulcro de por medio.

Desvías el cauce fluyente en mis venas…
y eres la causa que hierve por dentro.
Me pides apartar la vista de tu semblante… que me aleje
si soy quien no entiende… me dejo llevar por mi conciencia
de concentrar la atención a quien yo quiero
sin pedir ni por escrito en la carta… el menú de sugerencias.

Abandóname ahora…si nunca se olvida… lo que nunca llega
Nunca se apaga lo que nunca abrasa…
Nada sucede en esperar que suceda…
para lo eterno no hay otra vida,
no he escrito en esta página en blanco…
para esperar quien escriba.

Geber Humberto Pérez Ulín.​

 

Una poesía sorprendente!, Que letras más bonitas amigo. Un agusto leerte de veras.
Mis aplausos mercecidos a tu pluma.
Abrazos!

 

Gracias BETTY, eres muy amable con tu comentario, abrazos.